El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, presentó ayer el anteproyecto de ampliación del polideportivo ‘Javier Imbroda’, que gracias a una inversión de 1,6 millones de euros y un año de trabajo “casi duplicará” su capacidad para llegar a las 5.000 localidades que exige la ACB a los clubes. Imbroda defendió esta inversión porque, además de permitir que el equipo melillense juegue en la máxima competición del baloncesto español, también posibilitará albergar en nuestra ciudad grandes campeonatos o incluso partidos de la selección nacional. Imbroda destacó que los técnicos y arquitectos de la Consejería de Fomento “han corrido como galgos” para poder hacer el anteproyecto “en tiempo récord” y poder presentarlo antes del 15 de junio, tal y como se había comprometido. De esta manera, la Ciudad Autónoma “ya ha empezado a trabajar” en el reto de que el Club Baloncesto Melilla pueda materializar la próxima temporada el ascenso a la ACB que ha conseguido por méritos deportivos.
Así, está previsto instalar nuevas gradas tanto en el fondo norte, que es la canasta más cercana a la puerta de acceso al pabellón, como en el fondo sur. Habrá, en definitiva, “gradas supletorias por todos lados” para conseguir que de las 2.800 plazas actuales se pase a las 5.000 necesarias para jugar en la ACB. Las obras también afectarán al acceso a los vestuarios.
Este proyecto, en el que los técnicos de Fomento “se han roto la cabeza” durante los últimos días, supondrá un año de trabajo entre los trámites administrativos de adjudicación y las propias obras en la sede donde juega el Club Melilla Baloncesto para lograr “un pedazo de pabellón”.
Fuera “desmoralización”
Como ya hiciera el pasado martes, Imbroda recordó que el presidente de la ACB ha propuesto reservar la plaza al club melillense durante un año, tal y como ya ocurrió con el Ourense, lo que ahora tendrán que aprobar los 18 clubes que conforman esta asociación por un 75% de votos.
El presidente de Melilla rechazó la “desmoralización” que ha percibido ante este aplazamiento del ascenso y cree que “se ha escogido la mejor opción, la más sensata y la más posible”, ya que no se podía buscar en 15 días los casi 5 millones de euros que exige la ACB como canon y ampliar el pabellón de las 2.800 plazas actuales a las 5.000 necesarias.
De esta manera, dijo, tanto la Ciudad Autónoma como el Club Melilla Baloncesto ganan 12 meses para conseguir el dinero mediante la búsqueda de patrocinadores y abonados y hacer las obras necesarias en el pabellón. Posiblemente en ese tiempo, apuntó el mandatario local, se puedan derogar las “barreras económicas” que establece la ACB.
Apoyar con cabeza
Imbroda insistió en que esperar este año de transición hasta el ascenso “es lo más sensato, porque lo otro, poner 5 millones en 15 días, es imposible”. Sobre todo cuando, según dijo, no hay patrocinadores que aporten ese volumen de dinero. La Ciudad Autónoma ha recurrido a grandes empresas para intentar recabar su apoyo, pero “no se atan ya a perros con longaniza” y ni siquiera los grandes clubes tienen a grandes patrocinadores.
Eso obliga a reunir el dinero con la aportación de varias empresas dispuestas a poner dinero para lograr que Melilla cumpla su sueño de jugar en la ACB. “Vamos a conseguirlo”, aseveró optimista el presidente, que también dejó claro el “apoyo con cabeza, sensatez, sin locuras ni disparates” de la Ciudad Autónoma.