El hombre reconoció ser el autor de un delito de atentado en el juicio celebrado esta semana en el Juzgado de lo Penal número 2 de Melilla. Los hechos sucedieron en agosto de 2016, en la frontera de Beni Enzar. El procesado trató de cruzar el paso por un carril no habilitado para motos. Ante la advertencia de un Policía Nacional y la orden de detención, lejos de obedecer, aceleró su vehículo y golpeó al agente en la pierna izquierda. Le han caído dos años de prisión y una multa de 180 euros. Un hombre ha sido condenado a dos años de prisión por ser el autor de un delito de atentado a la autoridad. Esta semana se celebró el juicio en el Juzgado de lo Penal número 2 de Melilla, en el que el procesado confesó los hechos para llegar a un acuerdo de conformidad a efectos de rebajar la pena solicitada por el Ministerio Fiscal.
El individuo reconoció que los hechos sucedieron tal y como venían recogidos en el escrito de acusación de la Fiscalía. Según el mismo, el pasado 3 de agosto de 2016 el hombre atropelló a un agente de la Policía Nacional en la frontera de Beni Enzar.
El procesado trataba de atravesar el paso fronterizo en una moto, pero sin hacerlo por el carril habilitado para este transporte.
Cuando el agente le llamó la atención y dio el alto, el hombre, lejos de obedecer y detenerse, aceleró y continuó con su marcha, haciendo caso omiso en clara muestra de desprecio a la autoridad.
El policía, que no tuvo tiempo de retirarse, sufrió lesiones en la pierna izquierda tras ser golpeado con la moto del individuo.
Aunque inicialmente se le pedía una pena de tres años y nueve meses de cárcel, esta fue sustituida por la petición de dos años de prisión. Además, tendrá que abonar una multa de 180 euros.
El hombre, al carecer de antecedentes, ni siquiera tendrá que ingresar en prisión, ya que la fiscal no se opuso a la suspensión de la pena por un plazo de dos años.
Durante este tiempo no podrá volver a delinquir porque, si lo hiciera, se le revocaría la suspensión de la pena y tendría que cumplir los dos años de cárcel, además de la pena derivada del otro delito.
Tras explicarle la magistrada los términos de la conformidad, el hombre se mostró de acuerdo y aceptó su condena.
