“La gente puede aprovechar esa posibilidad para llenar el maletero del coche de compras en Marruecos y no gastar nada en Melilla. Eso va en detrimento de los pequeños comerciantes”
El PP criticó ayer la falta de falta de reciprocidad para el paso de mercancías que se está dando en los primeros días de funcionamiento de la frontera terrestre entre España y Marruecos en Melilla tras su reapertura, ya que mientras los agentes del país vecino impiden pasar productos, sí dejan salir con compras realizadas allí.
El vicepresidente segundo de la Asamblea, Daniel Conesa, señaló que su partido no tiene información oficial al respecto, pero sí por muchos ciudadanos y los medios de comunicación de que el régimen de viajeros solo se está aplicando a quienes pasan de Marruecos hacia Melilla “en cantidades importantes por persona” y no en el sentido contrario.
Conesa puntualizó que al PP le parece bien que exista ese intercambio comercial, que es a lo que se aspira, “pero siempre que sea recíproco” y “todo sometido a la legalidad” de lo permitido en el régimen de viajeros, sin que sea una expedición comercial.
Lo que está ocurriendo, sin embargo, es que “no existe la mínima reciprocidad” y por ello, Conesa considera que “si de Melilla a Marruecos no pasa ni un yogur, de Marruecos a Melilla no puede pasar ni un tomate” para que no salgan perjudicados los comerciantes de la ciudad.
“La gente puede aprovechar esa posibilidad para llenar el maletero del coche de compras en establecimientos marroquíes, como verdura, pescado y todo lo que dejen pasar por la frontera y no gastar nada en Melilla. Eso va en detrimento de los pequeños comerciantes y las tiendas de barrio que han proliferado en estos dos años”, aseveró.
Posible moción
Conesa apuntó que dejarán pasar “un plazo corto de pocos días” para ver si esta cuestión se soluciona, pero en caso contrario, cree que habrá que adoptar medidas y una de ellas podría ser la presentación de una moción en la Asamblea para plantear este problema al Gobierno central, que es el competente en la frontera.
Recordó que el PP presentó una moción en la Asamblea sobre la situación de Melilla en el seno de la Unión Europea, con la eliminación de la excepción Schengen en Melilla y Ceuta como uno de los aspectos fundamentales, así como el establecimiento de unas normas que regulen los intercambios comerciales en el régimen de viajeros. “Esas normas existen internacionalmente. Solo hay que aplicarlas”, dijo Conesa, que insistió en la necesidad de pedir a Marruecos que haya una reciprocidad en la frontera y se permitan esos intercambios comerciales regulados “como hay en las zonas fronterizas”.
También la puesta en marcha inmediata de la aduana comercial, cerrada de manera unilateral por parte de Marruecos hace casi cuatro años, el 1 de agosto de 2018.
“El día 31 no podrá entrar prácticamente ningún transfronterizo”
El PP cree que hay que solucionar cuestiones documentales en la frontera como las que afectan a los trabajadores transfronterizos, que “no están nada claras”, como cree que se puede observar en la última circular del Consulado de España en Nador, que “es muy preocupante” porque “el 31 de mayo no podrá entrar en Melilla prácticamente nadie” de este colectivo.
Por esta razón, la formación popular insta a dotar de medios materiales y humanos a dicho Consulado para que los transfronterizos puedan expedir ese visado especial, o un “sistema ágil para que los intercambios humanos y comerciales se puedan realizar siempre de manera ordenada y controlada”, algo a lo que “no se ha llegado, ni mucho menos”.