El Club Melilla Balonmano Virgen de la Victoria no dio opción alguna al penúltimo clasificado, el Balonmano Alarcos Ciudad Real, al que superó con autoridad por 35-23 el pasado sábado, en un encuentro sin historia, dominado de principio a fin por los de Oriol Ferré. Con este triunfo, el conjunto melillense asciende hasta la quinta posición del Grupo F de la Primera División Estatal y, aunque continúa a cuatro puntos de los puestos de Play-Offs, confirma su notable línea ascendente y su fortaleza como local.
Desde el inicio, el cuadro de la Ciudad Autónoma impuso un ritmo alto y una defensa muy sólida, evitando cualquier atisbo de sorpresa ante un rival que aún no conoce la victoria esta temporada. Los parciales reflejan la superioridad melillense: 2-2, 4-2, 7-4, 10-7, 12-7 y 16-9, dejando prácticamente sentenciado el partido al descanso con una renta de siete goles.
En la reanudación, el guión apenas varió. El Alarcos Ciudad Real logró reducir la diferencia en los primeros compases (20-14), pero fue solo un espejismo. El Virgen de la Victoira reaccionó de inmediato y volvió a encadenar parciales demoledores: 25-16, 28-18, 30-19, 32-21, hasta cerrar el encuentro con un contundente 35-23, en un ejercicio de solvencia y concentración.
En el plano anotador, Santi Bedoya volvió a ser determinante con 7 goles, seguido por Simao (5), Héctor Chicano (4), Roberto Amat (4) y Benallal (4). También aportaron Yusef (3), Enrique Chicano (3), Marco Martínez (2), Franco Quijano (1), Joan Toro (1) y Diego Rey (1).
Una victoria coral, necesaria y que reafirma las opciones de un Melilla Balonmano que sigue creciendo y que mantiene muy vivo su sueño de pelear por el Play-Off en las próximas jornadas.
