La Ciudad Autónoma de Melilla ha denunciado “la inquina y desprecio” del Gobierno de España hacia la localidad norteafricana con el anuncio del recorte de los agentes antidisturbios, que pasarán de 50 a 15.
“No podemos entenderlo”, ha dicho estupefacta ante los medios la vicepresidenta segunda y portavoz del Ejecutivo melillense, Fadela Mohatar, que ha subrayado que, ante las circunstancias geográficas que presenta la ciudad autónoma, “lo que necesitamos son refuerzos” y no recortes.
“Pero no solamente nos recortan la presencia del Estado, es que nos recortan en otros derechos que, a otros territorios, inexplicablemente, se les está concediendo de forma desmesurada y desigual con la ciudadanía”, denuncia Mohatar, que critica que el Ejecutivo central aún no ha explicado las razones por las que “recortó derechos en nuestras ventajas fiscales para poder ser competitiva”, así como en inversiones para afrontar la reconversión económica de la ciudad en ámbitos como el universitario.
“No nos dejan desarrollarnos y, encima, nos asfixian y nos pisan el cuello recortando la presencia del Estado. Es ignominioso”, ha apostillado.
