La plantilla de la U.D. Melilla reanudó este miércoles los entrenamientos de la semana en las instalaciones del Estadio Municipal Álvarez Claro, tras disfrutar el martes de su día de descanso. Con el sabor agridulce del empate ante la Deportiva Minera, especialmente por los contratiempos ocurridos en los minutos finales del encuentro, el equipo dirigido por Alberto Cifuentes ha vuelto al trabajo, centrando su atención en el partido del domingo frente al C.F. La Unión Atlético en la localidad murciana de Totana.
La sesión matinal de este miércoles se celebró sin la presencia del delantero Dago, quien el lunes fue sometido a diversas pruebas médicas debido a problemas musculares sufridos al inicio de la segunda parte del partido del pasado domingo.
Tampoco participó el defensa Isma Armenteros, que salió lesionado de la rodilla en los últimos minutos del choque y está a la espera de conocer el alcance de su lesión tras someterse a pruebas médicas.
Ante estas ausencias, Cifuentes ha contado con jugadores del filial para completar la sesión, ya que el domingo tampoco estará disponible Abdelah, expulsado en el partido ante los murcianos.
El plantel azulino volverá a ejercitarse este jueves por la mañana, al igual que el viernes, que será el último entrenamiento en Melilla antes del desplazamiento del equipo el sábado para enfrentarse a La Unión Atlético el domingo.
Por su parte, el próximo rival del Melilla está dirigido por el ex azulino José Miguel Campos y ocupa la sexta posición en la tabla clasificatoria, con 5 puntos, tras un balance de una victoria y dos empates, con un saldo de tres goles a favor y dos en contra.
La Unión empató en la primera jornada a domicilio ante el Antoniano, repitió empate en casa frente al Xerez Deportivo (1-1) y se impuso el pasado domingo al Lorca Deportivo por 1-2.
En el plano administrativo, la Real Federación Española de Fútbol no ha reconocido que La Unión Atlético pase a denominarse Unión Malacitano, ni tampoco sus estatutos, lo que obliga al club a disputar sus partidos en Murcia a pesar de entrenar en Málaga. Ante esta situación, los dirigentes acordaron jugar como locales en el Estadio Juan Cayuela de Totana.
