“Hemos salido en revistas especializadas, en diarios nacionales, teníamos a una figura del toreo como Morante que ha querido reaparecer en Melilla y eso es con lo que me quedo”, ha señalado, evitando pronunciarse sobre la descalificaciones de una parte del público contra el presidente del Gobierno Pedro Sánchez
El presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Juan José Imbroda, ha reivindicado la corrida de toros que se ha celebrado este miércoles 3 de septiembre en la Mezquita del Toreo con la terna Morante de la Puebla, Juan Ortega y Olga Casado porque “nos ha puesto en el mapa nacional taurino”.
“Hemos salido en revistas especializadas, en diarios nacionales, teníamos a una figura del toreo como Morante que ha querido reaparecer en Melilla y eso es con lo que me quedo”, ha señalado ante los medios, asegurando que el público asistente al festejo taurino estaba “muy ilusionado”.
Imbroda ha admitido que le ha sorprendido la actuación que ofreció la novillera Olga Casado pese a su juventud, ya que “ha dado lecciones de tauromaquia fenomenales”, y también ha elogiado a Juan Ortega, que es “uno de los mejores toreros que hay en el panorama”.
“Mala suerte” para Morante
Ha lamentado “la mala suerte” que tuvo Morante con el lote de toros que le tocó.
No obstante, ha recalcado que, con este evento, Melilla ha sido “catapultada en el mundo taurino”.
“Con eso es con lo que me quedo”, ha concluido, evitando pronunciarse contra los gritos y descalificaciones que profirió una parte del público asistente a la Plaza de Toros contra el presidente del Gobierno Pedro Sánchez.
Triunfo para Juan Ortega y Olga Casado
Juan Ortega y Olga Casado se alzaron este miércoles como los triunfadores en la corrida de toros que numerosas personas, más de tres cuartos de entrada en los tendidos, disfrutaron en la Mezquita del Toreo, sobre todo con la reaparición del diestro sevillano Morante de la Puebla que, sin embargo, tuvo mala suerte con el lote de toros que le tocó, faltos de fuerza y descastados sin querer ir hacia delante de verdad. Cortó un apéndice y las dos orejas.
Por su parte, Casado cortó una oreja a cada uno de sus oponentes.
