Mentira.
Con esta simple palabra ha rebatido la diputada nacional por Melilla, Sofía Acedo, las últimas declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, en las que señalaba “el compromiso” del Gobierno de España de reabrir la aduana comercial de Melilla con Marruecos y de crear una en Ceuta, señalando que “están analizando el momento” adecuado para efectuar dicha actuación.
Unas declaraciones que Acedo no comparte en absoluto.
“El Gobierno de España no está por la labor de reabrir la aduana comercial, y el PSOE lo ha demostrado con su voto en contra en las Cortes Generales”, ha señalado en rueda de prensa, mostrando su asombro con que la formación socialista haya votado en contra en el Senado de la moción que presentó el PP para instar al Ejecutivo central a reabrir dicha aduana.
“¿Qué está pasando?”
“Es mentira”, insiste, señalando que ya “no es que el Gobierno no quiera” efectuar dicha acción, sino “que no puede”. “Nos tendrán que explicar qué le deben a Marruecos para someterse a sus dictados ¿Qué está pasando?”, se pregunta la parlamentaria popular, que recuerda que aún “no se ha cumplido nada” de la hoja de ruta que fijó el Ejecutivo que preside Pedro Sánchez con el país magrebí hace ya dos años.
“Lamentablemente, el Gobierno no está por la labor de reabrir la aduana comercial en Melilla ni de abrir una en Ceuta, y lo demuestran con sus actos y con sus votos”, recalca.
No obstante, lo que es “más sangrante” para la diputada popular es que el régimen de viajeros, “fundamental para la economía de ambas ciudades autónomas”, siga bloqueado por Rabat y con una “desigualdad de trato” hacia melillenses y ceutíes”.
“No están por la labor de recuperar ninguna de las dos cosas”, lamenta indignada, dejando claro que al Gobierno central “le da igual si se maltrata al melillense que quiere cruzar la frontera en régimen de viajeros con cualquier producto”.
Así pues, y basándose en las reiteradas declaraciones de Albares sobre las relaciones con Marruecos, se pregunta “qué pasaría” si las relaciones diplomáticas con dicho país “no estuvieran en su mejor momento”.