La plantilla de la U.D. Melilla reanudó este miércoles los entrenamientos de la semana, después de haber disfrutado de dos días de descanso, preparatorio para el que será su último partido de Liga esta temporada como local ante el Atlético Baleares y que se disputará el sábado (Estadio Municipal Álvarez Claro: 19’00 horas), aunque pondrá el punto y final a la competición en Antequera el 25 de mayo.
El conjunto melillense quiere despedirse de la afición azulina con una victoria, tras una pésima temporada, y para ello ha iniciado el trabajo en el Estadio Municipal Álvarez Claro.
Las dos únicas bajas en este primer entrenamiento de la semana han sido las de Koffi, que sigue a la espera de conocer los resultados de las pruebas a las que fue sometido el pasado, y de Siddiki, quien se encuentra fuera de la ciudad con permiso del club y regresará a nuestra ciudad en las próximas horas.