Los de Rafa Monclova necesitan ganar para no depender de un Amics Castelló que está al acecho
El Club Melilla Baloncesto reanudaba este martes las sesiones de entrenamiento, tras jugar en la noche del pasado viernes ante el Rioverde Clavijo, al que venció por 91-68, y ‘recargar las pilas’ a lo largo de tres días. Así pues, los de Rafa Monclova preparan desde este martes el importante compromiso liguero del próximo domingo, en el que rendirán visita, desde las 18’30 horas, al WiZink Center de Madrid para verse las caras con el Movistar Estudiantes. Los madrileños llegan a esta penúltima jornada de la fase regular con una racha de cuatro victorias consecutivas pero sin opciones matemáticas de ascenso directo, aunque sí aspiran a mejorar su actual cuarto puesto de cara a los play off. No en vano, están a un solo triunfo del San Pablo Burgos y del Força Lleida, segundo y tercer clasificado, respectivamente.Los azulones, por su parte, son decimoquintos y tienen pegados a un Amics Castelló que marca la zona de descenso. No en vano, tanto melillenses como castellonenses están con un bagaje de diez encuentros ganados y 22 perdidos, aunque el Melilla Baloncesto tiene a su favor el ‘basket average’ y, por tanto, sigue dependiendo de sí mismo. El Movistar Estudiantes y el Leyma Coruña serán sus dos últimos rivales, mientras que los levantinos cerrarán la temporada frente al Leyma Coruña y el Grupo Alega Cantabria.
Los azulones perdían ante los madrileños en el choque de la primera vuelta, disputado el pasado 15 de diciembre en el Pabellón Javier Imbroda, por el ajustado resultado de 80-81. En aquel partido, Parker Van Dyke fue el más destacado de su equipo con 26 puntos y 25 de valoración, estando bien secundado por Hasan Varence y Óscar Alvarado, con 20 y 19 créditos.
