Sesenta años no son nada, para Pepe y Carmina. Así lo sigue manifestando su mirada.
Igual que el primer día, destila amor, compromiso, respeto y la certeza de saber que este largo viaje ha sido la mejor elección.
Que el trayecto aún no ha terminado. Y que compartirlo con su familia y amigos constituye un sueño cumplido y anhelado.
¡Feliz Aniversario!
Tus hijos