Dicha jornada, organizada por la Federación ‘Andalucía Acoge’, ha contado con la participación de personalidades como Miriam Bentarrak, directora general de Atención Humanitaria e Inclusión Social de la Inmigración del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones
El salón de actos de la Consejería de Cultura ha acogido este miércoles un seminario en el que diversas autoridades, expertos y entidades sociales han analizado las claves del anteproyecto de Ley Integral contra la Trata y Explotación de Seres Humanos. Dicho seminario ha sido organizado por la Federación ‘Andalucía Acoge’ y se ha podido seguir tanto presencialmente como por streaming.
Entre las personas que han intervenido, destaca la participación de Miriam Bentarrak, directora general de Atención Humanitaria e Inclusión Social de la Inmigración del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones; Teresa Armenta y Esther Pomares, integrantes de la Sección Especial de la Comisión General de Codificación para la elaboración de la Ley Integral; así como representantes de la Red Española contra la Trata y del equipo de trata de seres humanos de Andalucía Acoge.
La inauguración ha corrido a cargo de la delegada del Gobierno, Sabrina Moh y, por vía telemática, del presidente de Andalucía Acoge, Jesús García. La consejera de Educación y Cultura, Elena Fernández Treviño ha sido la encargada de clausurar la jornada acompañada por la vicepresidenta de ‘Andalucía Acoge’, Ana María Jiménez.
«Un antes y un después»
En su intervención, Moh ha asegurado que la futura Ley Integral contra la Trata supondrá «un antes y un después en el compromiso con la protección de los derechos humanos«, ya que, según afirma, «permitirá amparar a través de herramientas legales, institucionales y de carácter social a personas que sufren mucho en nuestro país y en otros países del mundo», así como » se reforzará la lucha contra la mafias de explotación y el crimen organizado«.
La máxima representante del Gobierno central en la ciudad se ha referido a la importancia que tiene este anteproyecto de ley, que es «muy ambicioso» dado que aborda la «lucha contra todas las formas de trata y de explotación», como la sexual, el trabajo forzoso, la servidumbre, la esclavitud y al tráfico de órganos.