El tenista manacorí Rafa Nadal venció ayer viernes a Schwartzman por 6-3, 6-3 y 7-6 para pasar a su decimotercera final de Roland Garros. El partido fue muy intenso desde el primer momento, y dejó un resultado un tanto injusto para un Schwartzman que plantó cara al tenista balear de principio a fin.
Los puntos fueron muy largos, y Nadal tuvo que adoptar un juego más agresivo que su rival para acabar anotándose el partido. El tenista balear marcó la diferencia con sus golpes de derecha paralela y su capacidad para cerrar, o más bien finalizar, los puntos en la red. Además de su capacidad para aprovechar cada bola importante.
Schwartzman, por otro lado, jugó un tenis muy sólido e inteligente, dejándonos algunos golpes imposibles que sorprendieron al propio Nadal.
El partido fue una dura prueba para el balear. Una prueba en la que ha demostrado, una vez más, el gran nivel al que está jugando.
La final será el domingo a las 15’00 horas. Su rival será el vencedor entre Novak Djokovic y Stefanos Tsitsipas.
