La vicepresidenta primera de la Asamblea, Cristina Rivas, salió ayer al paso de las críticas que el pasado jueves recibió de la asociación Guelaya-Ecologistas en Acción acerca de la ampliación del puerto, que esta entidad rechaza por considerar que perjudicará a la patella ferruginea, especie protegida y en peligro de extinción. En declaraciones a MELILLA HOY, Rivas consideró “demagógicas” las críticas de Guelaya y le preguntó si les parece bien que haya en el centro de nuestra ciudad una planta eléctrica como la de Endesa. “¿Qué clase de ecologistas son que prefieren seguir teniendo la planta de Endesa en el centro en vez de poder trasladarla a puntos alejados de la ciudad?”, preguntó Rivas.
La dirigente popular se hizo esta pregunta porque uno de los objetivos que tiene la ampliación del puerto es aprovechar el terreno que se ganará al mar para alojar en él industrias molestas y contaminantes desde el punto de vista ambiental y acústico, entre ellas la planta de Endesa o la incineradora. Además, preguntó “qué sería de Melilla si a principios del siglo XX no se hubiera hecho un puerto”. “Sería un embarcadero”, se autorrespondió.
Respecto al proyecto de Guelaya de renaturalización del Río de Oro, Rivas insistió en que la asociación ecologista no lo ha presentado al consejero de Coordinación y Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo. “Que se lo presenten y digan qué quieren hacer”, pidió la vicepresidenta de la Asamblea.