El director territorial del Ingesa en Melilla, Francisco Robles, recibió ayer en su despacho a los dos profesionales agredidos recientemente en la Unidad de Agudos de Psiquiatría del Hospital Comarcal, que han sido acompañados por varios representantes sindicales del sindicato de técnicos de Enfermería USAE y de SATSE, a quienes acompañaba también el presidente de la Junta de Personal, Carlos García Cano, promotores de la reunión. El director territorial conoció directamente de los afectados cómo sucedieron los hechos del pasado viernes. Asimismo el encuentro sirvió para repasar algunos aspectos del protocolo de actuación ante un paciente agitado, así como se conversó sobre el funcionamiento de la citada Unidad del centro hospitalario.
Conclusiones
Como resultado del encuentro Robles ha expresado su compromiso de proceder a la revisión del protocolo, cuando menos en los aspectos que puedan suponer un aumento de la seguridad de los trabajadores. Este protocolo es fruto de la labor de un equipo multidisciplinar de profesionales que, reunidos en una comisión, elaboró un documento de 30 páginas, cimentado bibliográficamente en protocolos similares, y en uso, de complejos hospitalarios como el de Toledo, Hospital Virgen del Valle, Universitario de Albacete y Hospital Psiquiátrico Ramón Alberca de Murcia.
Robles anunció una próxima reunión, con carácter inminente, en la que se va a revisar cómo ha funcionado el protocolo en este incidente, y aprovechará para conocer mejor el funcionamiento de la unidad en sí. La reunión contará con la asistencia de los responsables sanitarios del área. Asimismo apuntó a los representantes sindicales que animaba a los profesionales de la Unidad a aportarle sus inquietudes para su mejora y perfeccionamiento.
También se abordó en la reunión la posibilidad de que el mobiliario tenga que estar atornillado al suelo, mostrando los asistentes su escepticismo sobre la real efectividad de tal medida. Además, según los Manuales de Organización y Funcionamiento de las Unidades de Rehabilitación Hospitalaria (URH), éstas deben estar diseñadas de forma que garanticen una estructura con características suficientes de seguridad, privacidad, contención, descanso, oportunidad y proacción. En la reunión existió el consenso sobre que el material debe ser el idóneo para que no pueda ser utilizado como elemento agresor contra los profesionales.
La nota de Ingesa señala que con respecto a la falta de personal, «en la reunión no se trató este tema como prioritario, ya que la ratio personal sanitario/paciente en estas Unidades es correcta y el hecho de aumentar el personal, en ningún caso, evitaría el episodio de agresión inicial, ya que este es, en la mayoría de los casos, imprevisible». El director territorial acabó la reunión informando a los asistentes de que el ambiente de confianza con o en su medio laboral sea una constante, considerándolo prioritario y a ello se comprometió dedicar su labor y la del equipo de gestión.
