La Peña Barcelonista continúa sin poder estrenarse a domicilio en la presente temporada, y eso que ayer volvió a merecer llevarse algún punto de tierras granadinas y que incluso tuvo muy cerca el empate, puesto que a menos de un minuto del final el electrónico reflejaba un esperanzador 1-1. Sin embargo, un grave error al salir jugando desde atrás con el balón les terminó costando muy caro a los de Gabi González, que terminarían cayendo ante el San Antonio de Casanueva por la mínima. La Peña Barcelonista continúa sin poder estrenarse a domicilio en la presente temporada, y eso que ayer mereció llevarse algún punto de la localidad de Pinos Puente. No en vano, tuvo muy cerca el empate, puesto que a menos de un minuto del final el electrónico reflejaba un esperanzador 1-1. Sin embargo, un grave error al salir jugando desde atrás con el balón les terminó costando muy caro a los de Gabi González, que terminarían cayendo ante el San Antonio de Casanueva por 3-2.
El partido resultó ciertamente de toma y daca, con dos equipos que buscaron con ahínco la portería contraria. Así, los que golpearon primeros fueron los visitantes, que se adelantaron en el luminoso por mediación de Javi Varea. Los granadinos reaccionaron y consiguieron nivelar la contienda antes de llegarse al intermedio (1-1).
En la segunda parte, los dos porteros se convirtieron en los protagonistas del choque, con intervenciones de mucho mérito. Los locales finalmente no perdonaron y marcaron, a 54” de la conclusión, el 2-1 y, a 30”, el 3-1. Javi Varea, de nuevo, a 8 segundos del término del duelo, establecería el definitivo 3-2, un resultado injusto, más aún si se añaden los tres disparos a los palos que realizaron los azulgranas.