Uno de los momentos más emotivos de cuantos se vivieron ayer en la explanada de los Héroes de España, abarrotada por familiares de los integrantes del contingente que partirá el próximo noviembre hacia Irak a los que se despedía, fue la entrega por parte de María Piedad Castellano, hermana mayor de la Real y Franciscana Congregación de Nuestra Señora de la Victoria, patrona de Melilla al coronel jefe del grupo Ángel Castilla Trillo, del guión de mando.
Una ceremonia de despedida en la que tanto el comandante general Gutiérrez Díaz de Otazu, como el coronel del Grupo de Regulares de Melilla 52, Ángel Castilla, destacaron la importancia que aportan esas misiones de apoyo como el orgullo que para sus componentes supone formar parte de dicha colaboración.
Misión española
Con la contribución de las FFAA a las operaciones internacionales, España participa activamente en mejorar la seguridad en el mundo y la suya propia. En esta ocasión España asume la misión de instruir y formar al ejército iraquí. Lo hará a través de un contingente integrado por 300 militares de los que alrededor de 200 pertenecen a la Comandancia General de Melilla.
El grupo partirá en noviembre y permanecerá en Irak durante seis meses, integrado en los cuarteles generales de la coalición en Bagdad y Kuwait, en unidades de adiestramiento para una Brigada de las Fuerzas Armadas iraquíes, formando como instructores de operaciones especiales y unidades acorazadas en Bagdad y Taji.
