CSI-F rechaza la realización de las pruebas de diagnóstico que se efectuaron la semana pasada en 3º y 6º de Primaria, dado que consideran que "no tiene ningún sentido que los niños y padres estén sometidos a una situación de angustia y agotamiento", motivo por el que piden que "desaparezcan". CSI-F rechaza la realización de las pruebas de diagnóstico que se efectuaron la semana pasada en 3º y 6º de Primaria, dado que consideran que "no tiene ningún sentido que los niños y padres estén sometidos a una situación de angustia y agotamiento", motivo por el que piden que "desaparezcan".
En un comunicado, critican que las pruebas "no son elaboradas por el profesorado que trata con ellos, sino que son realizadas por un profesorado ajeno que no conoce las particularidades de cada centro y de su alumnado".
El sindicato considera que estas pruebas diagnósticas son un "desprecio hacia la labor docente", y es que se preguntan "de qué sirve que un niño saque un diez y otro saque un cero, si van a realizar una media y van a meter a todos en el mismo saco".
A juicio de la organización sindical estos test "son incoherentes e injustos", dado que se muestran "unos resultados globales que sólo sirven para compararnos con otros países que no tienen nada que ver con nuestro sistema educativo, con nuestros recursos, ni con nuestras instalaciones". "Ojala estuviéramos en igualdad de condiciones en cuanto a inversión o número de alumnos por clase", lamentó CSI-F.
“Sobrecarga para el profesorado”
Por otro lado, CSI-F considera que estas pruebas suponen "otra sobrecarga más de trabajo para el profesorado". Así, señalan que este trabajo "es administrativo y burocrático, y que además, no tiene ningún sentido pedagógico, ya que el alumno no va a disponer de su examen corregido para que pueda ver en qué se ha equivocado". Es por ello, por lo que el sindicato solicita eliminar estas pruebas que parten de la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE).
