Leyendo y consultando libros de la Historia de nuestra ciudad, después de más de un siglo de hechos tan heroicos que llevó a cabo nuestro Ejército, dentro y fuera de los recintos, en las distintas campañas, esta “Carta” es de un cabo enterrado en el Panteón de Margallo. A mí me ha dado la impresión, que este muchacho se encontraba un poco cohibido,…
… y muy solo, en las páginas, todas llenas de generales, jefes, oficiales, y cientos de soldados, como él, con sus nombres y los dos apellidos, y en sus pechos sus bien ganadas condecoraciones. Siendo como es, un héroe, me ha parecido observar en él, las pupilas húmedas y dilatadas de sus grandes ojos, una señal como avergonzado, dulce y dócil, que a cualquier lector puede desarmar, como lo ha hecho conmigo. Por eso le he “invitado” a que escribiera unas líneas para todos nosotros, melillenses, amantes de nuestra Historia. Por ese motivo yo le hago coger una pluma imaginaria, para que se exprese como más le agrade, y dice así:
“Queridos melillenses, mi nombre es Luís Molina, y soy cabo de Infantería. Deben disculparme si no recuerdo el apellido de la mujer que me trajo a la vida. Me da mucha pena, pero la verdad es que no lo recuerdo, como tampoco del pueblo donde nací, -será por las heridas-, me dice un compañero. Lo que si sé es, que estoy en el Panteón de Margallo, junto a muchos compañeros. Algunos me dicen que el 18.10.1909, fue cuando me mataron los moros, pero no saben decirme el lugar exacto donde caí. Siempre ando de paseo con Jacinto de Miguel Marcos, otro cabo de Cazadores Mérida 13. Él si que sabe donde lo mataron: fue en Sidi Musa, el 20.07.1909, y está enterrado junto a mí. Jacinto es de Huesca, muy noble, como la mayoría de los nacidos en esa tierra maña. El pobre siempre me está dando ánimos: ´Ves, Luisito, al menos ya figuras en los libros de Historia, como todos nosotros, junto a los generales, y los laureados´. Y hablando de generales: Si les dijera que el General Pintos me da un abrazo, apenas lo saludo. Hay veces que me lo encuentro, mientras sube por las escaleras del Ángel, al atardecer. Y también, de vez en cuando, se le puede ver con sus prismáticos de campaña, erguido, con su poblada barba, cómo su mirada la dirige al Gurugú, lugar donde cayó muerto por una traicionera bala enemiga, pudiéndosele oír, en voz baja, recitar unos versos que dicen. ´En el Barranco del Lobo / hay una fuente que mana / sangre de los españoles / que murieron por la Patria……´. Suele charlar con el que fuera Ayudante de Campo del General Marina, Capitán de Infantería, D. Julián Morón Iglesias. Mi amigo Jacinto me ha dicho que este capitán murió, en el Hospital Militar, a las doce y media de la noche del 28.07.1909, a consecuencia de las heridas sufridas. También pasea con el Tte. Alberto Molina Galano, de la Disciplinaria, hijo del General, D. Luís Molina Oliver. La verdad, es que ya poco tengo que contarles; solo que de vez en cuando nos visitan los compañeros heridos, que fueron evacuados a Córdoba, Cartagena y Granada, que murieron años después. Desde estos patios, tan llenos de Historia, les doy infinitas gracias a los que hacen que nuestros nombres jamás queden en el olvido de la desidia. Reciban, todos los que me han leído, un fuerte abrazo, ya que eso sí lo recordaré muy bien, mientras haya alguien que nos encienda la luz de la Gloria, y podamos caminar, con el sagrado honor, como bandera, ganado para nuestra Patria”.
Sé que para algunas personas, estas “Cartas” son pasajes oxidados por el tiempo, que solo conocen sus nombres por los rótulos de las calles de nuestra ciudad. Pero deben saber que todos ellos participaron en acciones admirables, donde se les exigió una valentía heroica, en defensa de nuestra cultura, de nuestra idiosincrasia, y de la españolidad de nuestra ciudad. Yo, modestamente, por medio de estas páginas, intento, con todas mis fuerzas, porque sé que es mi deber como melillense, y español, limpiar con amor, ese oxido, impregnado de desidia, y darle el esplendor, que estos héroes se merecen, desde que fueron enterrados en nuestro Cementerio de La Purísima.