“Un gran honor” dice haber sentido José Luis Rey tras alzarse con el Premio Internacional de Poesía Ciudad de Melilla en su 37 edición. El poeta cordobés ha querido mostrar su agradecimiento a Melilla, tanto por el impulso que le aportara a su trayectoria poética el prestigioso galardón como por la decidida apuesta de la Ciudad Autónoma por la Cultura, por las Letras y especialmente por el minoritario género de la Poesía. Se declara impulsor de los poemas que posean plenitud a través del mensaje, el áurea y el contenido expresado de una forma hermosa y no se encuadra en ningún movimiento poético. Para José Luis Rey ha supuesto un gran honor lograr el Internacional Ciudad de Melilla, por considerar que el premio tiene mucha tradición a nivel nacional y también internacional sobre todo en América y porque “lo han ganado maestros míos como García Baena, Villena o Luis Alberto de Cuenca entre otros grandes poetas”.
Dice que los premios además de producir una gran alegría y una subida de ánimo suponen un fuerte espaldarazo. “Teniendo en cuenta que la poesía es un género tan minoritario se agradece mucho la apuesta por la poesía y el reconocimiento público a los poetas por parte de la ciudad de Melilla”.
Resurgimiento poético
El escritor señala que están surgiendo editoriales nuevas en distintas ciudades, que editan poesía, además de las tradicionales de siempre como es el caso de Visor. “Todo esto induce a pensar que está creciendo la poesía en la actualidad”.
El doctor en Filología Hispánica, no se encuadra en ningún movimiento poético. “Sigo mi propio camino, aunque siempre he considerado como maestros a los poetas novísimos y a Juan Ramón Jiménez, así como a otros extranjeros que he traducido”.
En su poesía parte del uso de la imagen y la metáfora aunque para él es fundamental que el poema tenga también música “y creo que los poemas deben tener un mensaje y áurea y además un contenido que sea hermoso a través de la forma de expresarlo”.
Para el traductor y ensayista nacido en la localidad cordobesa de Puente Genil en 1973, el barroquismo más que una forma de escribir es una forma de vivir, es decir “la vida vista como escritura barroca del resto del mundo que saltara del ser” y añade que considera fundamental hacer un poesía con plenitud.
En cuanto a la posibilidad de poder mantenerse económicamente a través de la poesía, asegura que no se ha logrado ni ahora ni nunca. “Jamás ha sido posible vivir de la poesía a excepción de Lord Byron, aunque tampoco lo necesitaba”.
Cultura del Estado
El escritor resalta la oportunidad que desde los organismos oficiales se apoye a la poesía, “porque al ser un género tan minoritario a pesar de que últimamente lo sea menos, necesita el apoyo de la Cultura del Estado. Es fundamental y, por eso le estoy muy agradecido a la Ciudad de Melilla la oportunidad que me ha dado para difundir mi obra”.