El pasado agosto los melillenses nos despertamos con la visión de un gigantesco árbol del Parque Lobera que se había desplomado durante la noche alcanzado parte de su envergadura sobre la acera e incluso sobre la calzada de la calle Cándido Lobera. Hoy una lectora cuyas iniciales son A.L. advierte que en la antigua Granja Escuela Gloria Fuertes hay un árbol enorme que parte de sus ramas están quebradas y constituyen un riesgo, sobre todo los días ventosos y que justo al lado en la esquina del Vivero de Empresas se encuentra otro árbol seco, que en cualquier momento puede caer. “Espero, dice, que no nos ocurra como en Madrid que tengamos que sufrir una desgracia”, por lo que pide que observe el tema que denuncia.