El presidente de la asociación de comerciantes Acsemel, Abdeselam Mohamed, exigió ayer, a través de una nota de prensa, que se controlen los desguaces “clandestinos” de vehículos que hay próximos a la frontera de Beni Enzar. Esta situación está perjudicando a las empresas melillenses que se dedican a la exportación de chatarra al país vecino y a los comerciantes de la frontera. La asociación de comerciantes Acsemel solicitó ayer que se controlen los desguaces "clandestinos" de vehículos. Según el presidente de la entidad Abdeselam Mohamed, este hecho está perjudicando a las empresas melillenses que se dedican a la exportación de chatarra al país vecino y a los comerciantes de la frontera.
A través de una nota de prensa, Mohamed explica que estas actuaciones se realizan en los alrededores del paso fronterizo de Beni Enzar, lo que "obstaculiza el tránsito y entorpece a quienes vienen a comprar a Melilla". El presidente de Acsemel, de hecho, asegura haber recibido "numerosas quejas" al respecto, y subraya que "cualquiera que se acerque puede comprobar cómo alrededor de 20 vehículos son troceados en plena calle".
Código Penal
"Hemos llegado a un punto en el que nos parece normal, al igual que ver una bicicleta cruzando la frontera cargada de chatarra", dice Abdeselam Mohamed, que insta al Ejecutivo de la Ciudad Autónoma y a la Delegación del Gobierno que "apliquen la Ley", toda vez que el artículo 325 del Código Penal regula los delitos contra los recursos naturales y del medio ambiente, "castigando, entre otras cosas, el depósito de residuos en suelos".
Este artículo, manifiesta el máximo responsable de Acsemel, castiga las actividades de los desguaces "clandestinos", por lo que en Melilla, dice Mohamed, se están cometiendo un "elevado número de delitos contra el medio ambiente a plena luz del día".
Gestión
Asimismo, la asociación de comerciantes Acsemel pide a las autoridades melillenses que eviten esta actividad "ilegal" que "tanto está perjudicando a las empresas melillenses". Abdeselam Mohamed no entiende "por qué no se controlan y evitan estas actuaciones que van en contra de los intereses generales de los comerciales, es incomprensible".
Finalmente, Mohamed critica la “falta de capacidad de los políticos melillenses” para gestionar la frontera, en tanto que quienes vienen a comprar, “se ven obligados a soportar largas colas”.