Jesús Romero, el nuevo guardameta de la U.D. Melilla, ya se encuentra en la ciudad para ir aclimatándose y comenzar el próximo miércoles la pretemporada con su nuevo equipo. El sevillano llegaba este sábado por la tarde e inmediatamente se reunía con el entrenador Fernando Currás para conocer de primera mano sus planes para este temporada.
En sus primeras horas en Melilla también ha querido dirigirse a su nueva afición y desvelar cómo es el meta procedente del Algeciras C.F. «Yo soy muy sencillo, muy humilde, trabajador, una persona cariñosa y una persona que se deja querer mucho. De hecho, el año pasado todos éramos amigos porque nos dejábamos querer. Y yo soy así, una persona trabajadora que va a responder siempre, que cuando alguien me necesite ahí voy a estar. A partir del miércoles que empezamos a entrenar ya me iréis conociendo poco a poco», explica.
Contento en el Melilla
Reconoce estar muy contento por pertenecer a la U.D. Melilla y asume que es un reto para él. «Sí, obviamente es un paso grande porque vienes a un club que tiene mucha historia y es un escudo que va a pesar llevarlo. Y es una responsabilidad grande cubrir sobre todo el hueco que deja un portero como Munir, que hizo una campaña grande, y ahora toca suplirlo, hacerte valorar también aquí y es una responsabilidad que a mí personalmente me gusta. Lo acepto como un reto bueno y espero que salga todo adelante».
Jesús Romero se sube a un proyecto ilusionante, encabezado por Fernando Currás, y está convencido de que llegarán lejos. «Espero que la gente se suba al carro desde el minuto uno, que nos apoye y que esté con nosotros siempre», asegura el futbolista. «No conozco a la gente del Melilla, pero compañeros míos me han dicho que son gente de diez, que va a responder. Y seguro que si la gente está con nosotros, va a salir todo bien. Estoy convencido de que haremos una muy buena campaña este año».
El Melilla ha fichado a un portero ídolo en Algeciras y muy querido por la grada por su implicación, tanto dentro como fuera del campo. Ahora Romero espera ganarse el respeto de sus nuevos aficionados. «Cada club y cada afición es diferente. En Algeciras me trataron genial, me cuidaron hasta el más mínimo detalle y desde que acabo de pisar Melilla han hecho lo mismo. Lo que toca es ganármelo en el campo, que la gente esté contenta conmigo, que el míster y el club en general estén contentos con mi trabajo», resaltó el cancerbero, quien está convencido que dando el cien por cien «todo va a salir bien, por lo que intentaré igualar el nivel que tenía el año pasado y mejorarlo si es posible».