Un melillense que con cierta asiduidad se desplaza con un grupo de bañistas a la primera playa del nuevo paseo marítimo de Horcas Coloradas, se queja de que en el lugar se almacena gran cantidad de basura. “Algunos pescadores, -dice P.I.- arrojan los restos de los cebos y de su propia comida a la arena y nos encontramos muchas heces de perro, ademas de bolsas de plástico e incluso ropas y mantas de los menores que viven en las rocas de los acantilados y hasta que llegue el verano no pasan cuadrillas de limpieza por lo que tenemos que limpiar nosotros mismos o que se lleve la basura un temporal de Levante”.