La asociación Guelaya-Ecologistas en Acción y la Unidad de Desarrollo Local de la Universidad de Granada (UGR) volverán mañana sábado al barranco del Nano para llevar a cabo la que será la tercera plantación de jarillas de cabeza de gato, dentro del proyecto 'Recupera el patrimonio natural de Melilla. Pon tu semilla para un futuro sostenible'.
La asociación Guelaya-Ecologistas en Acción y la Unidad de Desarrollo Local de la Universidad de Granada (UGR) volverán mañana sábado al barranco del Nano para llevar a cabo la que será la tercera plantación de jarillas de cabeza de gato, dentro del proyecto 'Recupera el patrimonio natural de Melilla. Pon tu semilla para un futuro sostenible'.
Cualquier persona interesada en participar en una reforestación en el barranco del Nano puede coger la COA gratuita a las diez de la mañana en las propias cocheras de la empresa, o en la Plaza de España ( acera del Parque Hernández) hasta las 10.30 horas.
La jarilla de cabeza de gato se catalogó como especie en peligro de extinción hace años debido a la presión que sufría en el levante español por la urbanización de la costa en un proceso continuado desde hace muchas décadas.
El boom del ladrillo suponía una muerte anunciada, pero las iniciativas, que amparadas en el estado crítico de la especie, promovieron una serie de medidas de conservación, como la creación de microreservas, la prohibición de la construcción en muchos barrancos, y estudios científicos, que surtieron efecto.
Como resultado de esas acciones, la especie mejoró, y se cataloga actualmente como especie vulnerable, lo que quiere decir que si no se mantienen las acciones de conservación actuales volverá a entrar en peligro de extinción.
Las poblaciones españolas de la jarilla de cabeza de gato (Helianthemum caput-felis) han sido estudiadas desde el punto de vista genético. Se trata de tres poblaciones, la balear, la levantina (Alicante y Valencia) y la melillense. Las 3 regiones están separadas por el mar.
Se ha podido observar que las poblaciones melillenses presentan marcadas diferencias con la levantina y balear, que presentan más similitudes. De hecho, la población melillense es la más distante (360 y 685 Km respectivamente), lo que se cree que es debido a la separación de la costa africana de la europea hace 5.5 millones de años. De esta manera, la población melillense supone para la biodiversidad nacional un aumento de biodiversidad genética, debido a la fragmentación genética de las poblaciones.
En Melilla no se han producido estudios ni iniciativas al respecto, por lo que el proyecto que desarrolla BIOEDUCAS-Guelaya es pionero en la ciudad.