Todos en general y yo incluido teníamos 10 años menos (52 en mi caso), estaba en activo funcionarial, esa mañana ya tan temprano conducía como tengo costumbre escuchando la radio, cuando joven era más musical, en esa ocasión y ahora soy más de escuchar las noticias radiofónicas, escuchaba la SER, la tengo sintonizada habitualmente en la radio de mi vehículo y en mi transistor. Me acompañaban mis compañeros de Correos en visita de trabajo, Ramón y LLuís (Luís, pero él es molt valencià), nos dirigíamos a la zona norte de la provincia de Castellón, teníamos unas asambleas informativas, creo que en Benicarló, Vinaroz y Peñíscola, había que madrugar para coger a los carteros y carteras antes de salir al reparto desde sus Unidades de Reparto (antes carterías).
En esos momentos, poco más de las 7 de la mañana, escuchamos al locutor de la emisora, que en aquellas fechas creo era aun Iñaki Gabilondo el que conducía “las mañanas de la SER”, diciendo que se interrumpía la información habitual para dar la noticia que estaba llegando de dos “explosiones” en Atocha, en un tren (fueron las primeras) y luego hasta cuatro trenes explosionaron con esa triste y dolorosa masacre demoledora producida por terroristas. Llegamos a nuestro primer destino, aturdidos, confundidos y muy cabreados y preocupados por tan triste noticia. Por supuesto que las “asambleas” programadas no se realizaron y con aparatos radiofónicos en las diferentes Oficinas de Correos y en los recorridos en el coche seguíamos al momento todo lo que se nos iba contando y, como muchos o la mayoría de ciudadanos españoles en esos primeros momentos ¿cómo no?, pensábamos en la banda terrorista ETA, normal, y además, ya se iban encargando de “asegurarnos esa única autoría” desde el gobierno con sus manifestaciones inmediatas “Aznar, Acebes y otros muchos” y algunas emisoras, prensa escrita y luego televisión, sobre todo los más “serviles” al gobierno y a sus tesis Etarras, no cabía otra opción, aquellos medios escritos, además, con sus falsedades “adoctrinadas” lo que les motivaba más era la venta de papel y seguir el juego de la vertiente de los asesinos de la banda terrorista ETA, los cuáles como todos sabemos, son criminales que han matado a mucha gente, a sangre fría incluso, con el cobarde tiro en la nuca, pero, aquello, ya desde muy pronto parecía tener otras connotaciones bastante más diferenciadas y más próximas al 11-S de las Torres Gemelas.
De verdad, no me gustaría hablar de esto hoy, solo recordar y unirme al dolor de esas muchas familias destrozadas ese día y que por supuesto, no lo olvidarán jamás. Todos y todas eran trabajadores o estudiantes que habían madrugado, como yo, para acudir a sus puestos de trabajo o estudio, a lo que fuese, ninguno podía presagiar esa barbarie asesina, esos centros de trabajo se quedaron esperando a muchas de esas 192 personas que por desgracia ya no vio más. Otros muchos, unos 1800 más o menos quedaron heridos, algunos con secuelas muy importantes y dolorosas. El pueblo se preguntaba, ¿por qué, quien, que buscan realizando estas matanzas indiscriminadas a criaturas inocentes?, ese pueblo más cercano, el madrileño, se volcó en la ayuda solidaria junto con las fuerzas del orden, médicos, sanitarios, etc. Todos seguíamos sin entender nada, solo veíamos cadáveres, personas heridas, otros ayudando, incomprensión, angustia, rabia interna. No recuerdo bien, si esa noche, aunque creo que si, el pueblo se organizó como uno solo y una gran multitud salió a la calle de forma esporádica a manifestarse, sin saber aun a ciencia cierta contra quien, ¿ETA, islamitas, otros?, quien fuese, no había derecho ni motivos para arremeter con tanta dureza criminal contra esos ciudadanos circunstanciales que habían madrugado para estudiar o trabajar, no para ser destruidos por “mochilas cargadas de dinamita”, tan responsables eran los que las colocaban y explosionaban, como los que la proporcionaban, alguno de esos fallecidos también podíamos haber sido tu, yo, o cualquiera de nuestros hijos.
Además de la dureza del hecho en si, otra circunstancia me da náuseas y mucha rabia interior, y no es otra que esa utilización partidista que aun hoy se hace desde ciertas esferas del poder, ministros que lo fueron y que saben, porque lo saben y lo sabían entonces, pero siguen mintiendo y falseando la verdad descarada y vergonzantemente, junto con sus medios de comunicación afines, los cuáles, hace diez años tenían el convencimiento de que si impregnaban en la sociedad la autoría de ETA sus ventas se iban a disparar y de paso, “arrimaban el ascua a la sardina de la derecha que gobernaba”, además, ellos lo decían y repetían ETA, ETA y ETA, recuerdo a aquel Presidente del gobierno que cuando negoció con ellos en Suiza los llamó “movimiento de liberación vasco”, ¿entonces no eran terroristas, no eran asesinos?. Esa negociación “si era válida”, la que se desarrolló en Argel por mandato socialista ¿no? Es lo de siempre, “tu más”, “la viga o la paja en según qué ojos”, “el fin si justifica los medios” “o no los justifica” según protagonismo negociador. ¿Cómo acabó el terrorismo del IRA?, si no me equivoco, creo que negociando, pero, claro, no se puede decir y menos en campaña electoral, pues se corre el peligro de que el electorado afín nos vuelva la espalda, la mentira es más productiva la manipulación les daba resultado.
Fue responsabilidad del terrorismo YIHADISTA y se supo muy pronto, la policía lo tenía muy claro con su investigación, pero, erre que erre, lo de Acebes y Aznar sobre todo fue para que se fueran a casa en ese momento y la mayoría de países les “sacó los colores al gobierno español” por su insistencia a pesar de la evidencia, incluso, pedían a sus embajadas en España que lanzaran ese mensaje (ETA y solo ETA). Mas tarde la justicia así lo ratificó, esa justicia que cuando trabaja honradamente sin injerencias externas interesadas ejemplarizan con sus sentencias. En esas situaciones como en algunas actuales mejor harían los gobiernos y algunos fiscales en estar calladitos y dejar actuar con LIBERTAD, así de simple.
Llevamos bastante tiempo sin actos terroristas en nuestro País, yo y muchos más, estoy convencido, nos tenemos que alegrar y seguir profundizando en la paz total, que no muera nadie más inútilmente por la sin razón terrorista, dejemos de jugar con este tema por asuntos “electorales”, mucha gente sufre y se muestra contraria a esa utilización y quienes acusan a “otros”, precisamente, son los que a lo largo de nuestra democracia más han utilizado el terrorismo en campañas electorales y lo seguirán haciendo, por desgracia y descrédito de ellos mismos. El pueblo no es tonto y sabe de qué va la cosa y ciertas “manipulaciones intencionadas” tergiversando si hace falta verdades como puño tornándolas en mentiras, cada vez son menos creíbles.
Después de diez años de aquel acto terrorista ISLÁMICO/YIHADISTA solo queda el dolor de unas familias, el recuerdo de los seres queridos, muchos siguen sufriendo en silencio, respetemos a estas víctimas en su pesar, démosle ánimo y pidamos que los gobiernos de turno sean consecuentes con sus actos y manifestaciones, en ocasiones muy a la ligera, sin pensar en las consecuencias que pueden acarrear. Apostemos por una España libre, con derechos ciudadanos, por una verdadera democracia y relaciones estables y sinceras con otros pueblos, apostemos por políticos, honrados, honestos y eficaces, estoy convencido de que muchos habrán, “otros”, ellos mismos se han ganado a pulso el rechazo ciudadano, por lo menos, deberían pedir perdón, pero, mucho me temo que algunos de ellos y esos medios falseadores de entonces, aun seguirán diciendo que del 11-M no se sabe toda la verdad, cosa que ocurre en todos los actos terroristas de destrucción masiva, pero ellos, ¿no se por qué? Las dudas que tienen y defienden “ya sabemos todos por dónde van”. Me alegro de que después de diez años, por lo menos todas las asociaciones de víctimas del terrorismo, hoy han estado juntas, de verdad, eso me satisface bastante y las declaraciones del Ministro español de Interior que ha declarado, creo que convencido, “que efectivamente la autoría era solo de ese grupo terrorista ISLÁMICO/YIHADISTA”. En esta ocasión y sin que sirva de precedente, Sr. Fernández Díaz le felicito y alabo su expresión, muy contraria a la de algunos líderes o más bien “personajes sospechosos” de su mismo partido.