La U.D. Melilla se complica sobremanera su objetivo de alcanzar la permanencia al perder con justicia, en su terreno de juego, ante el C.D. Ronda por 1-2, en el tiempo de la prolongación. El filial dejó escapar una gran oportunidad de distanciarse en 11 puntos ante el antepenúltimo clasificado, conjunto que marca la zona de descenso, pero tras este revés inesperado ya son sólo 5 puntos los que le separan del equipo rondeño.
El conjunto filial, con su derrota en casa, ha resucitado a un equipo que estaba prácticamente hundido en los puestos de descenso, y en esta recta final del campeonato afronta un calendario tremendamente complicado ante rivales de la zona alta de la clasificación general, el primero de la lista es el líder Linares, al que rendirá visita el próximo fin de semana.
Por su parte, la victoria conseguida por el Ronda en el Campo de La Espiguera le devuelve todas sus ilusiones para pelear con grandes garantías de éxito por salvarse, cuando tan solo quedan ocho jornadas para el final del campeonato.
Primer tiempo sin ocasiones
La primera mitad transcurrió sin ocasiones, con un Melilla que intentó llevar la manija del partido, pero se encontró a un Ronda muy bien organizado defensivamente y que tuvo en Camine a su delantero más incisivo, aunque no puso en apuros la meta melillense en estos primeros cuarenta y cinco minutos.
Los locales tampoco disfrutaron de ocasiones claras, intentándolo tan solo en un disparo lejano de Sidi II, a los 31 minutos, que detuvo el cancerbero Alejandro, y ocho minutos después Pendu y Rachi, al alimón, no lograron conectar con el balón, dentro del área.
Toda la emoción del partido se produjo en la reanudación, con un Melilla B que golpeó primero, a los 52 minutos, ya que el visitante Faucho derribó a Hamin dentro del área. La máxima pena fue ejecutada por Sidi I y batió al meta Alejandro, pese a que éste llegó a tocar el balón.
Pero sin tiempo para festejar el tanto llegó la igualada al minuto siguiente, tras un rechace de la defensa local que aprovechó Humberto para batir, desde el vértice del área, al meta Jesús.
El partido entró en una fase de dominio alterno con el empate a un gol, aunque los visitantes se mostraron más ambiciosos ante la meta local y a los 65 minutos reclamaron un posible penalti por un derribo de Chechu en el área melillense, pero el colegiado no decretó nada.
La derrota, en la prolongación
El Ronda se mostraba muy peligroso, sobre todo en las botas de Víctor, que fue una auténtica pesadilla para la defensa melillense y suya fue la jugada que pudo significar el 1-2 a cinco minutos del final, cuando sirvió un balón de gol a Camine, pero éste falló incomprensiblemente ante Jesús.
El partido parecía que finalizaría con empate a un gol, pero no fue así porque en la prolongación los locales ejecutaron una falta, buscando sorprender a Alejandro a balón parado. Todos los futbolistas locales esperaban, dentro del área malagueña, el centro de Sidi I, pero éste en vez de centrar y terminar el partido en el área rival optó por tocar en corto para Riduan, al que rápidamente se le anticipó Camine y le quitó el balón, para montar una contra ‘mortal’ de cinco jugadores contra un solo defensor melillense, pasó sobre Martin y éste hizo lo propio para Humberto, que empujó el cuero a la red.
