FOTO JUANMA GARCÉS
El Melilla Sport Capital Enrique Soler se enfrentaba en la tarde de ayer al intratable líder del Grupo Oeste de la LEB Plata, el UBU Tizona, un rival que no conoce la derrota en su feudo y que solo ha sufrido una a lo largo de la temporada, precisamente frente a los melillenses en el choque de la primera vuelta. Esta vez no pudo ser. Los burgaleses, arropados por sus aficionados en el mítico ‘El Plantío’, no se dejaron sorprender y salieron dispuestos a marcar las diferencias desde los compases iniciales del encuentro.
De este modo, al término del primer cuarto ya mandaban los castellano-leoneses por nueve puntos (22-13), una diferencia que ampliarían a dieciséis al intermedio (40-24), aunque llegaron a establecer hasta una máxima de veinte unos instantes antes de que concluya el segundo asalto.
Tras el tiempo de descanso, el choque no cambió demasiado con los locales controlando el choque en todo momento y con ventajas importantes (48-29, a 4’29”), aunque al final del tercer periodo los de Javi Nieto rebajaban la diferencia a catorce (57-43), tras dos tiros libres convertidos por Alex Zurbriggen.
El partido podría parecer finiquitado pero lo cierto es que los melillenses no estaban dispuestos a hincar la rodilla. Así, firmaban un 0-7 de salida (57-50) para hacer encender las alarmas en los de Diego Ocampo, que tuvieron que ponerse el mono de trabajo para contener los intentos de los de Javi Nieto por meterse de lleno en la lucha por la victoria.
Sin embargo, el líder acabó imponiendo su teórica superioridad para romper, ahora sí, el encuentro a menos de tres minutos para la conclusión (73-56). Al final, otro arreón del MSC Enrique Soler les servía para perder definitivamente por doce (76-64).
Esta derrota, a falta de dos jornadas, obliga a los colegiales a ganar la semana que viene para sellar su permanencia e incluso asaltar las posiciones de play off de ascenso.