El Melilla Balonmano Virgen de la Victoria encajó este sábado una contundente derrota ante el BM. Bolaños por el resultado de 22-29, en un encuentro en el que sufrió bastante ante un claro aspirante a la fase de ascenso, pero sobre todo le pasaron factura las bajas por lesión. Con esta derrota, los melillenses pierden su condición de invicto en casa, tras cinco meses sin ceder la derrota.
Hay que destacar que el encuentro se disputó finalmente en el Pabellón de Deportes Guillermo García Pezzi, debido a las goteras del Pabellón Lázaro Fernández, y el choque comenzó con casi media hora de retraso.
Los manchegos afrontaron el partido con la máxima concentración e intensidad, y desde el inicio marcaron las diferencias, ya que al minuto quince de la primera mitad ganaban de seis goles (4-10) e incrementaron su renta con diez de ventaja (8-18), dejando así sentenciado el choque en el descanso, tras un pésimo primer tiempo.
En la reanudación, los visitantes no bajaron el pie del acelerador para vencer por 22-29.
El marcador cada cinco minuto fue el siguiente: 2-4, 3-8, 4-10, 7-14, 8-16, 8-18 (resultado al descanso), 9-21, 13-22, 15-22, 17-23, 20-27 y 22-29.
Por su parte, el máximo anotador de los melillenses fue, una vez más, Santi Bedoya, con 8 goles, seguido de Adrián Yumar (4), Santi Cardone (3), Thomy (3), Julio Gómez (1), Simao (1), Benallal (1) y Rubén Frutos (1).
