01-03-1921. Plaza y campo.
El torpedo encontrado los pasados días por los moros fronterizos a Alhucemas, ha sido recogido por el cañonero “Lauria”.
Como nos telegrafió oportunamente nuestro corresponsal, tiene unos siete metros de longitud, 1,80 de circunferencia y pesa una tonelada.
Se ha comprobado que es de fabricación inglesa, y debió ser disparado, sin duda, por algunos de los buques de dicha nación que hacen con frecuencia ejercicios de tiro en el Estrecho.
Por su mucho peso no puede mantenerse a flote.
Desde la playa, donde apareció, fue transportado a Alhucemas por el motor “Ibancos”, en el que iban el capitán jefe de aquella oficina indígena señor Soler, el sargento de la Compañía de Mar Sr. Valverde y algunos individuos de dicha unidad.
02-03-1921. Continúa el violento temporal de levante. Hundimientos de barcos.
Según se temía, el violento temporal de levante con que se despidió el mes de febrero, adquirió en las primeras horas de la madrugada última extraordinaria intensidad, haciendo presa de sus furias a cuantas embarcaciones se hallaban por desventura suya en la rada.
El sensible final, no se hizo esperar mucho tiempo, pues poco después de las dos de la madrugada, según nuestros informes, al pailebot “Juan Tonda” le garrearon las anclas, llegando empujado violentamente por el temporal, a internarse en el correntín y bien pronto, fue a estrellarse contra las rocas del muelle Becerra.
El pailebot “Barcelonés” que se hallaba fondeado frente al muelle de la Compañía de Mar, hubo de perder las amarras, yendo asimismo a romperse completamente, también contra el muelle Becerra.
Frente a los muelles de ribera, abordábanse constantemente la goleta “Joven Pepita” y el laúd “Luisa”, siendo peligrosa la situación de ambos.
Final de ello ha sido el hundimiento total de la primera, siendo la pérdidas de gran consideración y haber quedado gravemente averiada la segunda embarcación.
El pailebot “Paquita Ferrer” que llegó de Torrevieja con importante cargamento de sal consignado a don Francisco Carcaño, sufriendo también los embates del cada vez más violento oleaje, fue a parar al muelle de Becerra, resultando con importantísimos destrozos a consecuencia del fuerte choque.
Otra nota triste hay que registrar en esta información, siendo ella la situación de miseria en que queda una pobre mujer, viuda de un pescador conocido por “El Tuerto”, con varios hijos, que ha sufrido la pérdida de una pequeña embarcación dedicada a las faenas de la pesca, con cuyo producto atendía a su sustento.
La referida embarcación, que se hallaba fondeada, a corta distancia del muelle de la Compañía de Mar, quedó completamente destrozada.
Otras barcas pesqueras, que no habían podido ser varadas, por sorprenderles el temporal, resultaron también con algunas averías.
El pailebot “Barcelonés” había llegado los pasados días procedente de Valencia, trayendo cargamento de maíz para don Ramón Casaña, de los tres mil sacos que trajo se habían descargado dos mil, perdiéndose el resto. Venía consignado a la agencia Bernardi y había cargado leña para trasportarla a Palamós.
La goleta “Joven Pepita”, perdida completamente como el anterior, venía a la consignación de don Rafael Álvarez Claro, trayendo también cargamento de maíz para los señores Fernández y Bravo.
El pailebot “Juan Tonda” que como decimos ha sufrido destrozos de extraordinaria consideración, llegó los pasados días, procedente de Águilas con paja y carbón, para los señores Benarroch y Rodríguez (don Alfredo). Estaba consignado a la agencia Bernardi.
El laúd “Luisa” había llegado de Torrevieja, transportando cargamento de patatas y venía también a la consignación de la referida agencia.
El vapor minero “River Taf” atracado a la segunda rama del dique Villanueva, sufrió la rotura de algunas de las estachas, y ligeros daños al chocar contra el muelle.
Ayer tarde, con objeto de asegurar el fondeadero del pailebot “Pascual Flores” se procedió a facilitarle un cabo, operación que con verdadera exposición y grandes esfuerzos, realizaron cuatro de los tripulantes, en una pequeña embarcación.
A última hora continuaban siendo mecidos violentamente por las olas, la goleta italiana “Romeo”, los laudes “San Segundo” y “Nuestra señora del Carmen”, el remolcador de la Junta de Fomento “Reina Victoria”, lancha “Europa” de la Compañía de Mar y algunas otras pequeñas embarcaciones.
03-03-1921. Decrece el temporal.
…Al laud “Luisa”, que como es sabido, se halla gravemente averiado, se le dará hoy un remolque a fin de variarle de fondeadero y proceder a su reparación.
…Respecto a la goleta hundida “Joven Pepita”, hemos sabido los siguientes nuevos detalles:
Llegó los pasados días procedente de Málaga, donde tomó la carga de 2.550 sacos de maíz consignado a los comerciantes de esta plaza Sres. Burgos, Fernández y Bravo.
Durante la travesía le sorprendió violento temporal, viéndose obligada a arrojar al agua los sacos que traía sobre la cubierta, que eran 373. En este puerto pudo descargar 286, perdiéndose el resto al ocurrir el hundimiento.
Había sido adquirida dicha embarcación, hace dos años, por la casa Damm, de Barcelona, fabricante de cerveza, en 85.000 duros.
Disponía de magnífico motor, valorado en 30.000 pesetas, , y tanto el barco como la carga se hallaban asegurados.
Con el patrón de la “Joven Pepita” llamado Manuel Fora, venían a bordo su mujer e hija.
El motor del que fue pailebot “Barcelonés”, era también de gran potencia, calculándose su valor en 40.000 pesetas.
Cuando haya cesado por completo el temporal, se efectuarán los trabajos de reparación de las graves averías sufridas por los pailebots “Juan Tonda” y “Paquita Ferrer”, los que continúan sobre las rocas del muelle de la paja, a donde los arrojó la violencia del temporal.
12-03-1921. Plaza y Campo.
El médico don José Linares, vocal de la Junta de Arbitrios, dando cumplimiento al encargo que recibiera, ha logrado que las compañías mineras faciliten ocupación á no pocos indígenas pobres, que venían siendo socorridos en el refugio del Polígono.
13-03-1921. Plaza y Campo.
No pocos de los indígenas pobres, acogidos en el refugio del barrio del Polígono, se niegan, con distintos pretextos á tomar parte en los trabajos de carga y descarga del mineral.
Por su parte, las compañías mineras han ofrecido al vocal de la Junta de Arbitrios señor Linares, como ayer dijimos, dar ocupación á cuantos kabileños indigentes lo soliciten.
15-03-1921. Nuestras tropas han ocupado la playa de Sidi Dris, inmediata a Cabo Quilates.
Dada la extensión del artículo solamente muestro las nominaciones importantes del mismo.
Una noche endemoniada en Annual. Las columnas en marcha. Fortificación de Sidi Dris. Los notables indígenas reiteran su adhesión. El regreso a Annual se efectúa sin novedad. Felicitación del Alto Comisario.
15-03-1921. En honor de Sidi-Dris-Ben-Said.
El españolísimo musulmán Sid-Mehedi-Ben Chocrón dio anoche una comida en honor del erudito Dris-Ben-Said, secretario árabe del Alto Comisario.
En la minuta figuraban los platos más típicos y exquisitos de la cocina marroquí.
Personas cultas los comensales, adobaron el banquete con sabrosa charla. Sólo el Kaid Bachir, al lado de una belleza castellana, permaneció silencioso y triste.
Aguilar de Mera, ese recio poeta, de ágil inteligencia y alma soñadora, llamado a ocupar puesto preeminente en las letras patrias, nos deleitó recitando soberbias estrofas de su drama “El peso de una Corona”.
Ofreció el agasajo, en sentidos términos, Ben Chocrón y recogió las alusiones Ben Said, cantando uno y otro himnos de amor a la querida España.
El sexteto del Kursaal amenizó el té, y a media noche, dejando allí a la gente moza, abandonamos la elegante casa mora, donde anida el cariño a nuestra querida Patria, encarnado en el anfitrión y en el propietario Sid Amor.
16-03-1921. Plaza y Campo.
Varios reconocimientos en las minas de Beni Ulichek, han demostrado que fueron ya explotadas en tiempo de la dominación romana.
En las proximidades hay restos de una fortaleza.
19-03-1921. Plaza y Campo.
Conduciendo 6.500 toneladas de mineral la C. E. M. del R., zarpará hoy para un puerto inglés, el magnífico vapor "Helsyford". Es el mayor cargamento efectuado desde que comenzó en este puerto la exportación de mineral.
22-03-1921. Dos naufragios en Mar Chica ocasionan ocho víctimas
En las primeras horas de la madrugada del domingo, empezó a soplar fuerte viento de levante, que aumentó considerablemente hasta convertirse en verdadero huracán.
Frente al “Árbol Santo”. Cerca de las nueve de la mañana del domingo, el bote de pesca de los hermanos Antonio y Ramón Vera, que poco antes había salido de Nador para dedicarse en la Mar Chica a sus habituales faenas, al pasar frente al lugar denominado “Árbol Santo”, descubrió a varias personas que, asidas a las bandas de una embarcación medio hundida, luchaban por mantenerse a flote.
El bote de los hermanos Vera se acercó cuanto pudo a la embarcación zozobrada y con algunas dificultades logró poner en salvo a los náufragos, trasladándole a Nador.
Eran éstos, la vecina de Melilla Josefa González, de 50 años de edad, un paisano llamado Ángel Martínez, que habita en la calle Andalucía núm. 16, y cinco indígenas.
Un tanto repuestos de los sufrimientos pasados, los náufragos relataron lo ocurrido:
Cerca de las ocho de la noche del sábado, dos cárabos, uno cargado de carbón y otro de leña, salieron del zoco el Arbaá de Arkemán, con rumbo a Melilla.
La embarcación cargada de carbón, iba tripulada por seis indígenas, llevando como pasajeros a Josefa González y Ángel Martínez. La otra la tripulaban ocho moros.
A media noche, y cuando navegaban cerca del “Árbol Santo”, el furioso vendaval las dejó sin gobierno, echándolas a pique después.
Josefa González, Ángel Martínez y cinco indígenas, lograron asirse a las bandas del cárabo, y en esa angustiosa situación continuaron hasta las nueve del día siguiente, que fueron divisados y puestos en salvo por la barca de los Vera.
Sin fuerzas para seguir manteniéndose a flote, la pobre Josefa González estuvo dos veces a punto de hundirse en el abismo, siendo retenida, primero, por Ángel Martínez, y después por los indígenas supervivientes del naufragio. Del cárabo en que viajaba Josefa y Ángel, se salvaron todos sus tripulantes, excepto un hijo de Hamed Ben Kaddur, jefe de Beni Sicar… (Continuará)
Bibliografía…. El Telegrama del Rif