Los azulones acumulan ya ocho derrotas consecutivas y siguen caminando sobre el alambre a falta de cuatro jornadas para el final de liga
El técnico del Club Melilla Baloncesto, Rafa Monclova, no pudo ocultar su malestar tras cosechar el pasado domingo una nueva derrota, la octava consecutiva. En esta nueva ocasión, los melillenses perdían frente al Tizona Burgos en el Polideportivo El Plantío. El sevillano comenzó su comparecencia haciendo una valoración del choque y reconociendo el mal inicio de encuentro de su equipo. “Tuvimos muchas pérdidas absurdas”, señaló el entrenador del decano, que hizo hincapié en la falta de consistencia a la que ya hizo mención en la previa: “Sabíamos qué tipo de partido nos íbamos a encontrar y, aun así, en la primera parte nos costó entrar, por su ritmo, su agresividad y su acierto, sobre todo al principio”.Ya en el segundo cuarto, proseguía su análisis, “nos empezamos a encontrar mejor, con acierto de cara al aro y defendiendo bastante mejor” dijo, aunque fue crítico, sin embargo, con el desempeño de sus jugadores antes del descanso: “En los últimos cinco minutos encajamos un 15-2 que nos mató”. Y encajaron ese parcial, como recalcó, “por no tener ese nivel de dureza que ellos tienen”, añadió. Rafa Monclova se lamentó de la actitud de ciertos jugadores tras el intermedio e indicó que habían estado “muy blanditos” y aludió a que “alguno aún no ha entendido lo que se necesita en esta liga, y eso que está terminando”.
Preguntado por los pocos minutos de Parker Van Dyke, el preparador azulón respondió de forma muy tajante: “Son muchas jornadas en las que no nos está dando esa capacidad anotadora que tenía y defensivamente nos están castigando muchísimo con él. Entonces, traté de buscar otras opciones”, subrayó.Pese a todo, el entrenador del Club Melilla Baloncesto se mostró satisfecho con el juego de sus pupilos en la segunda mitad. “Estoy convencido de que si salimos como lo hicimos en la segunda parte tendremos opciones de ganar los partidos que nos quedan en casa”, concluyó su reflexión.
