El cielo se despertó plomizo y amenazaba lluvia, pero no fue suficiente para ‘aguar’ la fiesta que estaba por llegar. Era el día de’ su patrona’, Santa Cecilia, y los 90 músicos de la Escuela de Música ‘Paula Guillén Gallego’ no iban a consentir que nada ni nadie les impidiera celebrar este día con alegría y música. Sobre todo mucha música.
El ‘ratatatam’ de la caja marcó en todo momento la marcha de la procesión por calles como General Pradilla o Juan de Juanes, contagiando con un ritmo marchoso el trono de la patrona, la cual bailaba al son de los pasodobles ‘La Entrada’, ‘José Luis Valero’, ‘Fiesta en Benidorm’ y ‘Educandos de Benejuzar’.
Esta no se encontró sola en ningún momento, ya que se vio arropada por una multitud de melillenses que la acompañaron durante el recorrido y que afinaron las cuerdas vocales de los músicos a base de anís, vino dulce y roscos de azúcar.
Al finalizar el trayecto, la banda joven deleitó a los allí presentes con la interpretación de la pieza ‘Oda a Santa Cecilia’ y el Himno Nacional. No obstante, fue una improvisada charanga, con ‘Paquito El Chocolatero’ como estandarte, la que terminó por concluir una inolvidable y colorida jornada en la que Santa Cecilia volvió a ‘danzar’ por las calles de la ciudad tras dos años sin poder hacerlo debido a la crisis del covid-19.
