Melilla ha conseguido salvar el fin de semana sin que se produzcan entradas irregulares. Y, aunque el domingo fue un día más tranquilo en el perímetro respecto a los días anteriores, después de estallar en Ceuta una crisis entre España y Marruecos hace hoy una semana, sí que hubo dos intentos de entrada durante la madrugada de ayer a manos de 70 marroquíes. Según informó la Delegación del Gobierno en Melilla, ambos intentos fueron frustrados por la labor de los agentes de ambos lados de la frontera, en la sexta noche de presión consecutiva que sufre el perímetro melillense, la tercera por parte de personas originarias de Marruecos.
El primero se produjo sobre las 1.25 horas, con un intento de entrada de un grupo de unos 50 marroquíes por la zona de Palma Santa, cerca del paso fronterizo de Farhana.
A las 4:20 horas, hubo otro intento de entrada de 20 marroquíes por la zona del río de Oro, el mismo lugar donde horas antes, durante la tarde del sábado, hubo otro en el que participaron entre 200 y 300 personas del país vecino, y por el que sí lograron acceder 40 marroquíes el viernes por la tarde tras romper la reja del cauce.
La Delegación del Gobierno asegura que durante la noche del sábado al domingo no se produjeron entradas irregulares en Melilla, por lo que es la segunda consecutiva sin que ningún migrante consiga entrar.
Destacó que ello fue posible gracias a la labor de impermeabilización que se está llevando a cabo por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, en colaboración con las Fuerzas Armadas, y la participación activa de las fuerzas de seguridad marroquíes en la contención y disuasión de los migrantes.
La Delegación del Gobierno puso en valor el trabajo realizado por los profesionales de la Policía Nacional, la Guardia Civil, el Ejército y la Policía Local, que participan en el dispositivo anti intrusión con un amplio despliegue por todo el perímetro fronterizo.
Asimismo, expresó su reconocimiento al trabajo realizado por los profesionales de la empresa encargada del mantenimiento de la valla, ya que han estado en todo momento operativos para llevar a cabo reparaciones en el perímetro.
En concreto, ha sido necesario reparar la valla, colocar vallas new jersey en el arroyo Farhana y el río de Oro, y clausurar la puerta de la zona del cementerio para evitar entradas irregulares por esas zonas. Según la fuente oficial, estos operarios “han tenido un papel clave en la impermeabilización del perímetro”.
