Así lo confirma el juez decano de Melilla, Fernando Germán Portillo, quien defiende que los jueces simplemente están aplicando la ley después de que dicha norma esté provocando una cascada de revisión de penas a condenados por agresión sexual
El efecto de la onda expansiva que ha generado en la sociedad española la aplicación de la nueva Ley de Libertades Sexuales del Ministerio de Igualdad, más conocida como ‘Ley del Sólo Sí es Sí’, sigue levantando ampollas y dejando un sabor amargo entre la población con la cascada de revisión de penas que se están realizando a condenados por agresión sexual, habiéndose ya reducido 12 condenas por abuso sexual y excarcelado a cinco personas en el país.
En el caso de Melilla, los juzgados de los penal no han revisado por el momento ninguna pena a alguna persona condenada por un delito de agresión sexual desde que entró en vigor la norma auspiciada por la ministra Irene Montero, tal y como confirma al MELILLA HOY el juez decano de Melilla, Fernando Germán Portillo, quien defiende la labor que están realizando los jueces en dicha cuestión después de las críticas vertidas contra ellos ya que, según afirma, solo están aplicando la ley.
“Si donde ante ponía ocho años, ahora pone seis, es contar, no hay nada (más)”, razona, dejando claro que esto “no tiene nada que ver ni con la perspectiva de género ni con la sensibilidad” que apelan desde el Gobierno de la Nación.
Es más, Germán Portillo asegura que “se está forzando por parte de algunos que se ven acorralados y tratar de achuchar una disposición transitoria del Código Penal de 1995” de manera “analógica y extensiva”, pero asegura que para eso “no hace falta perspectiva de género” puesto que es una “interpretación tan forzada que va contra los principios generales de derecho”. “Aquí no hay una cuestión de sensibilidad como dice el presidente del Gobierno o de perspectiva de género, se trata simple y llanamente de coger y decir que donde pone ocho pone seis y aplicar la ley española. No hay más”, afirma contumaz.
En ese sentido, el juez decano subraya que, al modificar algunos aspectos del Código Penal en materia de delitos contra la libertad sexual, se rebajan las penas a condenados por algún delito. “Algunos venían entendiendo que esa revisión estaba limitada de alguna manera”, afirma, explicando que, a diferencia de “lo que había antes”, la ‘Ley del Sólo Sí es Sí’ no recoge una disposición transitoria -que son las que regulan el periodo de transitoriedad de la antigua ley a la nueva-, lo que ha ocasionado que las penas “se hayan revisado por arriba y por abajo”.
“Se está haciendo lo que siempre ocurre cuando hay una modificación del Código Penal que supone una rebaja de penas, lo que nunca habíamos visto era que no hubiera una disposición transitoria para tratar de limitar los casos en los que se pueden pedir la revisión, y que a continuación se le eche la culpa al estamento judicial por hacer lo que estamos obligados a hacer, que es aplicar la ley”, explica.
“Más que formados”
Por último, y ante la petición lanzada por Montero de que se lleve a cabo una mayor formación en los jueces ante el goteo de reducciones de penas, Germán Portillo responde tajante.
“Los jueces después de cuatro o cinco años de carrera, cuatro o cinco años de oposición y dos años de escuela estamos más que formados para hacer nuestro trabajo que es un trabajo técnico”, sostiene. Además, apostilla que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ofrece a los jueces cada año más de una veintena de cursos para que se “formen”, y entre todos esos cursos “siempre” hay 10 o 12 dedicados a la perspectiva de género, de igualdad o de violencia de género.
