La U.D. Melilla cerró la primera vuelta con un empate sin goles ante el Real Murcia, un resultado que frena su racha positiva de dos victorias consecuitivas, aunque al menos consigue recortar las diferencias con la zona de la permanencia, que la tiene ahora a 5 puntos de distancia. En cuanto al choque fue bastante intenso, insulso y trabado, aunque los locales pusieron mayor intensidad y actitud, pero de cara a portería rival apenas puso en apuros al meta pimentonero, aunque eso sí mereció hizo más en ataque que el conjunto que dirige Pablo Alfaro. (Fotos U.D. Melilla).
El equipo de Juan Sabas comenzó bastante bien el partido, sometiendo al Real Murcia, al que encerró en su área, y en el minuto 8 dispuso de una gran ocasión para adelantarse en el marcador, tras un pase de Dani García sobre Dani Martín, que remató a bocajarro, pero el meta Manu García salvó el tanto con un auténtico paradón, despejando a córner.
La segunda ocasión del primer tiempo fue también de los melillenses, en el minuto 14, en un lanzamiento de falta de José Antonio González que David Suárez remató de cabeza, fuera de puerta.
La inercia positiva de los melillenses se cortó precisamente tras la lesión del visitante Imanol Alonso, en el minuto 18, que tuvo que ser trasladado en ambulancia al Hospital Comarcal, donde se le diagnosticó una rotura del peroné de la pierna derecha, con la que el jugador del Real Murcia dice adiós para toda la temporada.
El partido estuvo parado durante siete minutos por la lesión del jugador visitante, entrando en su puesto el ex unionista Isi Gómez. Precisamente, esta acción desconectó al Melilla del encuentro, mientras que el Real Murcia se metió en el partido, aunque sin llegar a la portería de Javi Montoya, excepto en un fortísimo trallazo de Isi Gómez, en el minuto 31, desde la frontal que despejó el guardameta local.
También hubo malas noticias en el Melilla con la lesión de Bandaogo, por unas molestias musculares, siendo sustituido por Cotán, pero de ahí al final, con una prolongación de ocho minutos, no ocurrió absolutamente nada en ninguna de las dos áreas.
En la reanudación, el Melilla volvió a salir mejor que el Real Murcia y buscó la victoria, aunque solo dispuso de dos ocasiones, la primera en el 46’, en una gran acción individual de Dani García, que se deshizo de la marca de tres jugadores, pero finalmente optó por un centro chut, al que no llegó por milímetros Siddiki a rematar de cabeza para empujar el cuero al a red.
Y en el 55’, el propio Siddiki puso en apuros al meta Gianni, que despejó a córner, un disparo ajustado al palo izquierdo.
Por su parte, el Real Murcia no llegó ni una vez a la meta defendida por Javi Montoya, menos aún tras la expulsión de Víctor Rufino, por doble cartulina amarilla, en el minuto 63.
Los locales aumentaron su dominio, pero la defensa pimentonera estuvo muy acertada y despejó todo el peligro que llegó sobre su área, concluyendo el encuentro con empate sin goles.
