El PP y Vox criticaron ayer en la Asamblea la tardanza del Gobierno de Melilla en tramitar las mociones que presentan los grupos políticos en la Asamblea. El portavoz del PP, Miguel Marín, puso como ejemplo la moción debatida ayer sobre la OTAN, que fue registrada por el PP el 7 de febrero de este año, es decir, “más de cuatro meses”.
Ante esta situación, el PP la reconvirtió en pregunta en el Pleno de Control celebrado el 22 de abril, por lo que Marín consideró que “no tiene sentido” debatir sobre esta propuesta cuando ya se abordó dicha cuestión en la Asamblea hace un mes y medio y “las posiciones de los grupos políticos están más que claras”.
El portavoz popular recordó al Gobierno que “los melillenses merecen un respeto” y los asuntos que les afectan deben ser abordados en la Cámara local “en tiempo y forma y no cuando les dé la gana”.
El presidente de la Ciudad Autónoma, Eduardo de Castro, acusó en su réplica al PP de “demagogia” porque, aunque admitió la tardanza en la tramitación de las mociones, algo que achacó a la baja del técnico encargado, aseguró que “al final llegan” al Pleno de la Asamblea, cuando “en la anterior legislatura, ni llegaban”.
Precisamente la crítica del PP por la tardanza en la tramitación de las mociones protagonizó el único momento de tensión que se ha vivido en la sesión plenaria, cuando la vicepresidenta primera de la Asamblea, Dunia Almansouri, cortó a Marín para instarle a que se ciñera al punto del orden del día y el portavoz popular le acusó de intentar coartar su libertad de expresión.
La vicepresidenta primera de la Asamblea lo negó alegando la contradicción que suponía, a su juicio, que Marín estuviera exigiendo el cumplimiento del Reglamento en la tramitación de las mociones y, en cambio, no lo hiciera durante su turno de palabra al no ceñirse al punto del orden del día de la sesión.
Este rifirrafe provocó también una discrepancia entre los dos vicepresidentes de la Asamblea, ya que Daniel Conesa, vicepresidente segundo y diputado del PP, defendió a su compañero de bancada frente a Almansouri señalando que Marín solamente estaba argumentando.
“El Gobierno tiene en un cajón mociones que son para mejorar la vida de los melillenses, que parece que les importa bien poco, además de incumplir el Reglamento”, insistió el portavoz popular al reanudar su turno de palabra, en el que enumeró otras iniciativas presentadas por su partido hace meses y que no han sido tramitadas todavía.
Vox retira su moción “por ser extemporánea”
Vox, el otro partido de la oposición, también se sumó a la crítica del PP de una manera simbólica: retirando del orden del día su moción para la “promoción, difusión, protección y defensa del legado de la hispanidad y de reivindicación de la cultura, lengua, héroes y tradiciones españolas”.
“Retiro la moción por ser extemporánea”, explicó el único diputado de Vox en la Asamblea, Javier Da Costa, según el cual esta iniciativa había sido presentada hace dos meses, evidenciando que “las mociones se quedan en un cajón” y no son tramitadas en tiempo y forma. Debido a la retirada de la moción de Vox, no hubo debate al respecto.
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