Los jugadores dirigidos por Juanjo Garcés siempre fueron a remolque en el marcador, sin apenas opciones reales de poder traerse algo positivo para nuestra ciudad. La Peña Real Madrid se quedó ayer con la miel en los labios, después de sumar un nuevo resultado negativo a domicilio. En esta oportunidad, los madridistas perdieron frente al Futsal Alhendín por el resultado de 5-3, en un duelo en el que los jugadores dirigidos por Juanjo Garcés siempre fueron a remolque en el marcador, sin apenas opciones reales de poder traerse algo positivo para nuestra ciudad.
El choque comenzó con granadinos y melillenses totalmente volcados al ataque en busca de adelantarse lo antes posible en el electrónico, aunque en este primer periodo lo más destacable por parte de ambos conjuntos fue el buen trabajo defensivo y también la falta de acierto para convertir las ocasiones de gol que crearon. De esta forma, al intermedio se llegó con tablas en el luminoso (1-1). Hay que incidir en que los peñistas volvieron a pecar de inocentes de cara a la portería contraria, con numerosas oportunidades para marcar desaprovechadas.
En la segunda mitad, los goles empezaron a caer, aunque el cuadro andaluz llevó en todo momento la iniciativa en el marcador. Pese a ello, la Peña Real Madrid tuvo posibilidades de meterse en el choque, pero la escasa puntería le privó de poder, al menos, empatar la contienda. Los goles de nuestro representante fueron obra de Javi Bejerano, Ilias y Yimi.
En definitiva, que los de Juanjo Garcés continúan con su asignatura pendiente de ganar lejos del Pabellón Lázaro Fernández. No en vano, cabe recordar que los madridistas solo han vencido hasta la fecha en su visita a la pista del Torremolinos.
