La Ciudad insta al Gobierno a que pida ayuda a la Unión Europea para que exija a Marruecos la reapertura de la aduana comercial

El vicepresidente primero del Gobierno local, Miguel Marín, insiste en que el Ejecutivo central y la Delegación del Gobierno han estado “engañando al conjunto de los melillenses” sobre este asunto desde que se cerró la aduana por parte del reino alauita

La Ciudad Autónoma de Melilla ha instado al Gobierno de España a que solicite ayuda a la Unión Europea (UE) para que ésta última exija al Reino de Marruecos a que reabra la aduana comercial de Melilla con el país magrebí, cerrada de forma unilateral en 2018 por éste último.

En rueda de prensa, el vicepresidente primero del Gobierno melillense, Miguel Marín, se ha pronunciado sobre la advertencia que el reino alauita ha lanzado sobre este asunto, vinculando la reapertura de la aduana comercial en Melilla y la creación de una en la ciudad hermana de Ceuta a que el club comunitario respalde la postura de Marruecos sobre el Sáhara Occidental.

La conclusión a la que ha llegado el número 2 del Gobierno melillense es que el Ejecutivo que preside Pedro Sánchez “nos tiene totalmente engañados porque sabemos por las declaraciones del propio Gobierno de Marruecos los motivos por el cual no se abre la aduana comercial”.

“Nos han estado engañando durante estos últimos seis años, y la delegada del Gobierno nos ha estado engañando también. Engañando al conjunto de los melillenses, tomándonos el pelo y diciéndonos un día sí y otro también que la aduana comercial se abriría con carácter inmediato”, critica.

Un Gobierno “débil”

Marín ha expuesto ante los medios dos cuestiones “bien distintas”. Una es la aduana comercial, y otra el tránsito de mercancías en régimen de viajeros, bloqueado por el régimen marroquí y que está haciendo “un daño terrible al comercio local”. “Estamos viendo como entra mercancías desde Marruecos a Melilla y, sin embargo, desde Melilla no se puede pasar ni un yogurt, ni botella de agua ni unos pantalones. Eso es inadmisible”, denuncia, sentenciando que el Ejecutivo central es “débil” con Marruecos.

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