Una niña de unos ocho años vecina del barrio de Cabrerizas fallecía víctima de un atropello, tras arrojarse en marcha del tren electoral que se había incorporado esa misma jornada a la campaña del Partido Popular. La pequeña era atropellada por un coche que adelantaba al tren en el momento que la niña saltó del vagón. El conductor aseguraba que no había arrollado a la niña, sino que fue el último vagón del mencionado tren.
Zarpaba el buque Martín Álvarez con destino a la localidad bosnia de Split con doscientos legionarios, entre ellos, diecinueve de Melilla.
El Ayuntamiento inauguraba unos nuevos aparcamientos en la zona de García Cabrelles donde hoy se levanta el nuevo Mercado Central.
Una niña de unos ocho años vecina del barrio de Cabrerizas fallecía víctima de un atropello, tras arrojarse en marcha del tren electoral que se había incorporado esa misma jornada a la campaña del Partido Popular. La pequeña era atropellada por un coche que adelantaba al tren en el momento que la niña saltó del vagón. El conductor aseguraba que no había arrollado a la niña, sino que fue el último vagón del mencionado tren.
Zarpaba el buque Martín Álvarez con destino a la localidad bosnia de Split con doscientos legionarios, entre ellos, diecinueve de Melilla.
El Ayuntamiento inauguraba unos nuevos aparcamientos en la zona de García Cabrelles donde hoy se levanta el nuevo Mercado Central.
