Sólo seis de los, por entonces, trece miembros del Grupo Socialista tenían potabilidades de repetir candidatura para las elecciones de mayo, según había podido conocer MELILLA HOY de fuentes fiables, aunque lógicamente la última palabra la tendría la asamblea que se iba a celebrar unos días después. Lo que sí se había confirmado es que le alcalde iba a ser Gonzalo Hernández, a quien iban a acompañar, de momento, en puestos estratégicos sus correligionarios Román Dobaño, Alberto Paz, Manuel Molina, María del Carmen Muñoz y Juan Luis Higueras. Quedaban, por tanto, descartados todos los demás, incluido el actual delegado del área técnica, Flavio Jiménez, al que se quitaba de en medio como única medida para suprimir el grado de independencia e individualismo que había alcanzado el equipo de gobierno.
