Las asociaciones musulmanas de Melilla se mostraban incapaces de ponerse de acuerdo sobre quiénes serían los representantes que integrarían la comisión municipal que plantearía el sistema de enajenación de la Mezquita Central. Tras dos reuniones celebradas en la sede de la Asociación de Vecinos Assalam de la Cañada de Hidum, no se había elegido a esos representantes dadas las radicalizadas discrepancias que existían en ese sentido. El grupo de inmigrantes subsaharianos acogidos en las instalaciones de Cruz Roja desde hacía más de un año, enviaban un escrito a organismos internacionales como la ONU o Europa, condenando el convenio Hispano-Marroquí sobre readmisión de inmigrantes porque consideraba que era ilegal.
