La AndalusAir mostraba su interés por operar en Melilla, conectando la ciudad con Málaga, Almería, Granada, Sevilla y Madrid, así como Casablanca y Mequinés. El viceconsejero de Turismo, Javier Mateo, presentaría al gobierno local el plan de viabilidad de la compañía, para que lo estudiasen y diesen o no su visto bueno.
El portavoz del gobierno local, Ignacio Velázquez, revelaba que el ex presidente de la Ciudad, Mustafa Aberchán (CPM) había actuado "desde la sombra" para impedir la celebración del Pleno de la Moción de censura del mes de julio que le revelaría del cargo. También desmintió que hubiese ido a Bruselas donde dijo tener previsto mantener ciertas reuniones con representantes de los grupos parlamentarios para denunciar "el racismo institucional" de Melilla.
