Las melillenses firmaron un buen encuentro y lo cierto es que, pese a perder, se mostraron superiores a su rival. La falta de acierto de las visitantes de cara a la portería contraria y una mala actuación arbitral resultaron dos factores determinantes para que el partido se decantase a favor de las locales. El Torreblanca Melilla vio truncado ayer, en tierras murcianas, su buena racha de las últimas semanas, al caer derrotado frente al Jimbee Roldán B por un ajustado 4-2.
Las melillenses firmaron un buen encuentro y lo cierto es que, pese a perder, se mostraron superiores a su rival. La falta de acierto de las visitantes de cara a la portería contraria y una mala actuación arbitral resultaron dos factores determinantes para que el partido se decantase a favor de las locales.
Las pimentoneras, bastante más eficaces en ataque, llegaron a colocarse con un favorable 2-0 mediado el primer periodo. Lubna conseguía reducir las distancias antes de llegarse al tiempo de descanso y daba ilusiones a las de Gabi González de cara a la segunda mitad.
Sin embargo, las locales volverían a poner tierra de por medio en el electrónico con la consecución del 3-1. Las blanquinegras no arrojaron la toalla y lograrían meterse de nuevo en la contienda con el tanto de Daiana. Por desgracia, y cuando mejor pintaban las cosas para las chicas del Torreblanca, llegaría otro mazazo con el 4-2 que marcaban las jugadoras del filial del Jimbee Roldán, un resultado que, a la postre, ya sería definitivo.
