La magistrada titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Melilla dictó sentencia condenatoria para dos individuos después de que estos reconocieran que habían propinado una paliza a otro hombre en la que llegaron a usar incluso vasos de cristal para herirle. Se les ha impuesto la pena por el delito de lesiones que cometieron en octubre de 2015, en torno a las 3.30 horas, en una discoteca del Puerto Noray. El perjudicado tiene una cicatriz en el labio superior como secuela de las lesiones sufridas. Dos individuos han sido condenados como los autores de un delito de lesiones. La magistrada titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Melilla dictó sentencia después de que los procesados reconocieran esta semana su implicación en los hechos que les llevaron hasta el banquillo de los acusados.
Lesiones de 10 días
Estos hechos ocurrieron de madrugada, en octubre de 2015. Tuvieron lugar en el Bar La Compañía, ubicado en el Puerto Noray. Según se recoge en el escrito de acusación del Ministerio Fiscal, los dos individuos agredieron a una tercera persona en el interior del local, propinándole numerosos golpes, usando incluso vasos de cristal para impactarlos contra la víctima.
En consecuencia, el perjudicado sufrió lesiones que tardaron diez días en curar, siendo siete de estos días impeditivos debido a la gravedad de las heridas. Además, al denunciante le ha quedado una cicatriz en el labio superior a causa de una herida que sufrió en el transcurso de la paliza.
Los dos procesados admitieron los hechos tal y como estaban expuestos en el escrito de acusación de la fiscal. A cambio, se les rebajó la pena solicitada a los dos años, de acuerdo al artículo 148 del Código Penal. Además, tendrán que indemnizar de forma conjunta y solidaria a la víctima con 2.100 euros por las lesiones y las secuelas causadas.
Al carecer los individuos de antecedentes penales, la fiscal no se opuso a la suspensión del ingreso en prisión. No obstante, no podrán delinquir en los próximos cuatro años.
En el caso de que vuelvan a cometer un acto delictivo, se les revocaría la suspensión y tendrían que cumplir esta pena más la que se impusiera derivada del otro delito. Así lo comunicó la magistrada a los procesados, que se mostraron de acuerdo con los términos de la conformidad.
