Categorías: Deportes

88-80. Un mal primer cuarto condena al decano

Los jugadores del decano, tras encajar un adverso parcial de 32-18, intentaron la remontada de forma infructuosa en el último periodo (Foto Gipuzkoa Basket)

El Melilla Ciudad del Deporte Baloncesto perdió este domingo ante el Gipuzkoa Basket, con lo que los de Rafa Monclova amplían a cinco el número de derrotas consecutivas y se mantienen en la decimoquinta plaza de la tabla.

El Melilla Ciudad del Deporte Baloncesto visitaba este domingo San Sebastián para tratar de imponerse a uno de los mejores equipos de la competición, el Gipuzkoa Basket. Era un día importante, pero iba a ser difícil desde el inicio, y es que un viaje accidentado, con retrasos, pérdidas de equipaje y un largo etcétera, iba a complicar la salida a la cancha de los de Rafa Monclova.El partido estuvo marcado por un primer y segundo cuarto errático en todos los sentidos por parte del decano mientras que los donostiarras mostraban un acierto extraordinario (12 de 24 en triples), pero a la vuelta del descanso se vería una cara totalmente diferente de los melillenses. No en vano, a falta de 2’50” para la conclusión, tuvieron la posesión para igualar o ponerse por encima en el marcador, aunque al final el triunfo se lo llevaban los vascos por un resultado de 88-80, gracias al acierto de los guipuzcoanos desde el 4’60.El choque se abría con una canasta de Hasan Varence, aunque la defensa del bloqueo directo de los visitantes fue insuficiente para frenar los ataques del cuadro local. En el minuto 5, Parker Van Dyke, con tres tiros libres convertidos, recortaba las distancias (13-10), pero el Gipuzkoa Basket contestaba con un parcial de 10-0, obligando al técnico sevillano a pedir un tiempo muerto. Dos triples consecutivos de Sofiane Briki hacían recuperar un poco la ilusión a los azulones -ayer de blanco-, que no querían desconectarse del encuentro. Sin embargo, y debido al alto nivel que estaban exhibiendo los donostiarras, el primer asalto concluía con 32-18.Tras un inicio de cuarto sin anotación y con varias pérdidas absurdas del decano, más dos triples consecutivos de Savkov, el Gipuzkoa Basket estableció una máxima ventaja de veinte puntos (40-20), a falta de 7’20” para el intermedio. Monclova agitó el banquillo buscando el revulsivo para tratar de dar la vuelta al electrónico, dando sus frutos con un gran acierto desde el exterior con cuatro lanzamientos desde la línea de 6’75. Así, y también después de varias buenas defensas, los melillenses lograban recortar la diferencia a doce puntos. Mikel Odriozola paró el partido para realizar cambios tácticos y frenar a su rival, y de este modo seguir controlando el ritmo del mismo. Al descanso se llegaba con un claro 53-39.

Tras el paso por los vestuarios, intercambios de canastas que no favorecían a los de Rafa Monclova que continuaban catorce abajo (57-43) después de más de tres minutos disputados. No obstante, tras algunas rotaciones en el quinteto, el Melilla Baloncesto se recuperaba realizando unos minutos finales bastante buenos, adjudicándose el parcial por 19-24, con lo que el último periodo echaba a andar con 72-63 en el luminoso.El último acto comenzaba bien para los melillenses (77-70), con Bryce Douvier como protagonista de la remontada. Los visitantes, con una gran intensidad defensiva y aprovechando la falta de acierto de los donostiarras en el tiro libre, se acercaban a sólo dos puntos (80-78), a 2’50” de la conclusión. Tras una buena acción atrás de Javi Menéndez, el decano dispuso de la oportunidad de igualar o ponerse por delante en el luminoso. Por desgracia, precipitadas tomas de decisiones en ataque permitieron al Gipuzkoa Basket sentenciar el partido desde la línea de personal (88-80).

Carlos R.Busto

Acceda a la versión completa del contenido

88-80. Un mal primer cuarto condena al decano

Carlos R.Busto

Entradas recientes

«Enshittification» y «Weaponification» en Melilla: Reflexión sobre los ataques a Guelaya-Ecologistas en Acción Ricardo Dominguez Llosa El pasado 19 de diciembre de 2024, Juan Carlos Montoya publicó un artículo titulado en Tribuna de opinion, en el que vertió duras críticas hacia la asociación Guelaya-Ecologistas en Acción, una ONG que lleva años trabajando de manera activa y comprometida en la defensa del medio ambiente en Melilla. Este tipo de ataques no solo desvirtúan el trabajo de una organización que ha demostrado con hechos su compromiso con la sostenibilidad y la justicia climática, sino que también representan un fenómeno más amplio y preocupante que podríamos calificar como «enshittification» y «weaponification» del discurso público. ¿Qué significa «Enshittification» y «Weaponification»? El término «enshittification» se utiliza para describir el proceso mediante el cual algo que inicialmente tiene un propósito positivo o constructivo se degrada hasta convertirse en un espacio o herramienta tóxica. Por otro lado, «weaponification» hace referencia a la instrumentalización de ciertos discursos o ideas para atacar, desacreditar o deslegitimar a individuos o colectivos. En este caso, ambos conceptos parecen aplicarse al contexto de las opiniones vertidas por Montoya, que no solo atacan sin fundamento a Guelaya, sino que también reflejan una tendencia preocupante hacia la polarización y la desinformación en temas tan cruciales como el cambio climático y la protección medioambiental. Guelaya-Ecologistas en Acción: Una labor encomiable Guelaya-Ecologistas en Acción lleva años trabajando en Melilla para promover la sostenibilidad, proteger la biodiversidad local y concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de actuar frente a la crisis climática. Su labor incluye actividades de reforestación, limpieza de entornos naturales, campañas de sensibilización y propuestas de políticas públicas orientadas a la sostenibilidad. Estas acciones no solo benefician al medio ambiente, sino que también contribuyen al bienestar de la comunidad melillense. La ONG forma parte de una red nacional de Ecologistas en Acción, que se rige por principios de transparencia, participación y rigor científico. Sus informes anuales y actividades están respaldados por datos y análisis que buscan incidir en la toma de decisiones políticas y sociales. El ataque de Montoya: Una crítica sin fundamento En su artículo, Montoya recurre a un lenguaje incendiario y descalificativo, calificando a los miembros de Guelaya como «provincianos», «terraplanistas» y «negacionistas del cambio climático». Estas acusaciones no solo son infundadas, sino que también resultan irónicas, dado que Guelaya ha sido una de las voces más activas en Melilla en la lucha contra el cambio climático. Este tipo de críticas parecen más bien una estrategia para desviar la atención de los problemas reales que enfrenta la ciudad, como la falta de políticas públicas efectivas para abordar la crisis climática o la degradación de los espacios naturales. Al atacar a quienes trabajan por el bien común, Montoya no solo desacredita su propia posición, sino que también contribuye a perpetuar un clima de desinformación y hostilidad que dificulta el progreso colectivo. No matar al mensajero, pero sí escuchar el mensaje El título del artículo de Montoya, resulta paradójico, ya que su texto parece precisamente un intento de desacreditar al «mensajero» que trae un mensaje incómodo pero necesario: la urgencia de actuar frente a la crisis climática y la necesidad de proteger nuestro entorno natural. En lugar de atacar a quienes trabajan por el bien común, sería más constructivo abrir un diálogo basado en el respeto y la evidencia científica. La crisis climática es un problema global que requiere la colaboración de todos los sectores de la sociedad, y descalificar a quienes están en la primera línea de esta lucha solo nos aleja de posibles soluciones. Reflexión final El caso de las críticas de Montoya a Guelaya-Ecologistas en Acción es un ejemplo de cómo el discurso público puede ser utilizado de manera tóxica para atacar a quienes trabajan por el bien común. Sin embargo, también es una oportunidad para reflexionar sobre la importancia de defender a las organizaciones y personas que, con esfuerzo y dedicación, luchan por un futuro sostenible. Es fundamental que, como sociedad, aprendamos a distinguir entre las críticas constructivas y los ataques infundados, y que apoyemos a quienes, como Guelaya, dedican su tiempo y energía a proteger el planeta y garantizar un futuro mejor para todos. En un mundo donde el cambio climático es una realidad innegable, no podemos permitirnos el lujo de desviar la atención de los problemas reales con discursos vacíos y descalificaciones sin fundamento.

Por Ricardo Dominguez Llosa   El pasado 19 de diciembre de 2024, Juan Carlos Montoya…

36 minutos hace

Consulte la portada de MELILLA HOY del miércoles 8 de enero de 2025

Ya puede realizar su compra en la “Versión Digital”, en formato PDF, a través de…

38 minutos hace

La U.D. Melilla ficha a Fran Varela

FOTO ATLÉTICO PASO La U.D. Melilla informó este martes del fichaje de Fran Varela, jugador…

2 horas hace

Salim Abdelkader: “El equipo trabajó muy bien en el bloqueo y en la defensa para controlar el partido desde el principio”

El Club Voleibol Melilla comenzó 2025 con una victoria 3-0 sobre Unicaja Costa Almería, destacando…

16 horas hace

Ahmed Raha afronta con ilusión su nuevo mandato al frente de la FMEM

La Federación de Montaña y Escalada de Melilla, bajo la presidencia de Ahmed Raha, inicia…

16 horas hace

Sánchez felicita la Pascua Militar y reconoce el «compromiso» de las FFAA, que trabajan por los afectados por la dana

El presidente Pedro Sánchez felicitó a las Fuerzas Armadas en la Pascua Militar por su…

16 horas hace