El Club Melilla Baloncesto, pese a realizar ayer un buen partido en líneas generales, no pudo sorprender a la gran revelación de la temporada, el Força Lleida, que acabó llevándose el triunfo del Pabellón Javier Imbroda por un ajustado 75-80.De este modo, los melillenses encadenan su novena derrota consecutiva y deberán estar muy atentos a lo que acontezca el domingo en el duelo entre el Rioverde Clavijo y el Amics Castelló, ya que una victoria de los castellonenses les igualaría en la tabla a los de Rafa Monclova y las cosas se complicarían aún más en la lucha por eludir el descenso.El primer cuarto se desarrollaba con bastante equilibrio y con alternativas en el marcador, finalizando el mismo con empate a 16. En el segundo asalto, los ilerdenses fueron imponiendo su juego con el paso de los minutos, lo que se vería reflejado en el electrónico en el tramo final de este periodo al colocarse diez puntos arriba (26-36), a poco de llegarse al intermedio. Finalmente, con dos tiros libres convertidos por Guillem Arcos se marchaban los equipos a los vestuarios con 30-38 en el luminoso.El tercer acto comenzaba con intercambio de canastas y con los azulones más entonados en los dos lados de la cancha, consiguiendo reducir a sólo tres puntos (42-45) su desventaja en el marcador al paso por el minuto 24. Dos más tarde se mantenían los visitantes con tres de renta (46-49), aunque darían un arreón posteriormente para colocarse con un +9 (48-57). Los jugadores del decano reaccionarían y se acercarían al término de este cuarto (54-58). En el último periodo, los de Rafa Monclova apretaron de lo lindo, logrando empatar el choque (58-58), aunque no culminaron la remontada. Los ilerdenses supieron jugar con el marcador a favor para acabar venciendo por una diferencia de cinco puntos (75-80). Guillem Arcos fue el mejor del Melilla Baloncesto con 21 puntos y 23 de valoración.
