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Victoria en la prórroga del filial colegial

El Melilla Ciudad del Deporte Enrique Soler B logró este domingo su segundo triunfo de la temporada, primero a domicilio, tras vencer al Baloncesto Murgi, en el tiempo extra, por el resultado de 90 a 96. Samoro, con 26 puntos y 24 de valoración, y Víctor Fernández, con 21 puntos y 20 de valoración, fueron los más destacados en las filas melillenses.

El partido arrancaba con un conjunto colegial que supo aprovechar los errores iniciales de los anfitriones para escaparse 3 a 10. No obstante, dos triples seguidos de los almerienses les servían para acercarse a un punto (9-10), produciéndose desde este instante un intercambio de canastas hasta que, con empate a 20 a falta de 3’27” para el final del primer cuarto, los locales apretaban en defensa para endosar un parcial de 9 a 0, cortado por un triple de Samoro restando dos minutos. Con 31 a 25 concluía un primer acto en el que los ataques fueron superiores a las defensas en ambas canastas.El segundo acto comenzaba con el equipo de Ana Mónica Rodríguez golpeando primero de la mano de Xabi López (7 puntos hasta el momento). Pero los almerienses, empujados por su afición, continuaban llevando la iniciativa en el marcador con rápidas acciones ofensivas que le llevaban a dominar por 35-27, manteniéndose las distancias en el meridiano de este periodo tras anotar los visitantes dos puntos que recortaban a seis su desventaja (41-35).

Posteriormente, los melillenses, con un nuevo triple de Samoro, le darían la vuelta al electrónico, aunque no podrían continuar por delante al tiempo de descanso, debido a un lanzamiento de tres convertido sobre la bocina por Berni Giménez, que permitiría al Murgi marcharse con una mínima ventaja al intermedio (50-49).El paso por los vestuarios sentó bien al Melilla Ciudad del Deporte Enrique Soler B que, tras un 0 a 7 de salida en los primeros lances de esta segunda parte, obligaba al técnico local, Javier Jiménez, a pedir un tiempo muerto para frenar el buen momento de los de Ana Mónica Rodríguez.

Los colegiales llegarían a disponer de una máxima renta de nueve puntos (52-61), liderados por Samoro y por Víctor Fernández, aunque los locales se meterían de nuevo en el encuentro de cara a los definitivos diez minutos (68-70).En el cuarto asalto, con bastante equilibrio en el juego, los de la ciudad autónoma no pudieron romper el partido, pese a que se situaron cuatro arriba (79-83) a escasos 56 segundos. Los ejidenses, arropados por sus aficionados, conseguían forzar la prórroga (83-83). El tiempo extra echaba a andar con imprecisiones y con constantes alternativas en el luminoso, aunque el conjunto filial terminaría apuntándose el triunfo por 90-96.