Jornada de intereses encontrados para los dos representantes melillenses en el Grupo XIII de la Liga Nacional de Juveniles. Por un lado, la Peña Barcelonista logró el pasado sábado imponerse al cuadro malagueño del Dos Hermanas por 2-1, en lo que significó el primer triunfo de Castell como entrenador y el reencuentro de los azulgranas con la victoria, después de muchas jornadas. Un triunfo que llega demasiado tarde para los azulgranas que se encuentran a ocho puntos de la permanencia, falta de ocho jornadas, pero que sirve para empezar a lavar la imagen de un equipo que está desarrollando una mala temporada.
Por su parte, el Rusadir perdió en tierras del Torcal, ante el Antequera, en un partido muy igualado, en el que la actuación arbitral dejó mucho que desear para el cuadro de Ahmed y Karim, que cumplieron su segundo partido de sanción.
Además, el encuentro estuvo empañado, antes de comenzar, por la agresión del jugador antequerano Juan Bravo, que escupió, empujó y golpeó al melillense Pollo, una ‘vendetta’ que se encargó de justificar el jugador malagueño, cuando, según él, fue agredido por el melillense cuando militaba en el Gimnástico Melilla.
Tras este resultado, el Rusadir continúan con 32 puntos, siete más que Los Molinos, que es la escuadra que marca la permanencia.
El Rusadir tendrá este sábado un difícil compromiso en La Espiguera, ante el Puerto Malagueño, tercer clasificado, mientras que la Peña Barcelonista viajará a Almería para enfrentarse al filial de la Unión Deportiva Almería.
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Una de cal y otro de arena