Tras la investigación desarrollada en Melilla y Ceuta por parte de Irídia Centro para la Defensa de Derechos Humanos, Novact y Fotomovimiento, hoy hacen público el informe en el que denuncian los distintos tipos de violencia que sufren las porteadoras al trasladar los bultos de un lado a otro de la frontera. Por un lado, aseguran que son víctimas de las agresiones y los abusos policiales. Asimismo, lamenta las condiciones en las que ejercen su trabajo, así como el diseño de los pasos por conducir al «amontonamiento». Como «un embudo». Así califican en un informe Irídia Centro para la Defensa de los Derechos Humanos, Novact y Fotomovimiento el paso de barrio Chino en Melilla. Según exponen, este se va estrechando hasta que «solo permite el paso de las porteadoras una a una por sus extremadamente reducidas dimensiones». A través de la investigación en Ceuta y Melilla, las entidades pretenden plasmar en su estudio los «abusos policiales» y la situación de fragilidad en la que se encuentran las trabajadoras del comercio atípico, «tanto a nivel de derechos como de acceso a los servicios públicos».
Violencia diaria
Aunque hoy se presenta el informe en el Col-legi de Periodistes de Catalunya, en un adelanto a eldiario.es las organizaciones ponen de manifiesto la falta de regulación en el ejercicio del contrabando, además de asegurar que son muy comunes los casos de violencia por parte de las autoridades. «Son diarios y las agresiones físicas muy comunes», resalta. «Las fuerzas de seguridad rasgan con cuchillos los bultos de las porteadoras, ya sea mientras los están cargando a la espalda o incluso en el punto de recogida», sostiene el informe.
Según denuncian dese Irídia, Novact y Fotomovimiento, la configuración de los pasos fronterizos «conduce inevitablemente al amontonamiento de personas» y termina provocando «situaciones de tensión, amontonamiento, asfixia e incluso avalanchas». Al respecto, recuerda que el pasado mes de marzo falleció una porteadora tras una avalancha en el paso del Tarajal II, en Ceuta. Otras dos mujeres murieron en el mismo paso en 2009. En Melilla también perdió la vida una porteadora, Safia Azizi. Fue en 2008, cuando trasportaba bultos en Barrio Chino.
«Se vulneran los derechos de las porteadoras tanto a través de la misma naturaleza de su trabajo y de las estructuras de los paso por donde se les permite circular como por el trato que reciben por parte de las fuerzas de seguridad», concluye el informe.
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