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Un individuo finge un desmayo para evitar la prisión preventiva

Antes de que los agentes de la Policía Nacional lo llevaran a la prisión, el acusado, que permanecía esposado, tenía que firmar la citación judicial. Cuando estaba a punto de firmarla, el hombre se tiró al suelo fingiendo un desmayo, como advirtieron los policías y el resto de presentes en la sala. «Esto nos lo hacen mucho», aclaró uno de los agentes, «pero se llama fantasía».
Con ayuda del traductor, su letrado le aconsejó que «dejara de montar el número». Finalmente, un médico forense acudió a la sala para observarlo y, sin advertir malestar, el individuo abandonó la habitación con los policías para ser trasladado a prisión. Un individuo acusado por robo con violencia e intimidación fue trasladado ayer a la sala de vistas del Juzgado de lo Penal número 2 de Melilla tras ser capturado por las autoridades, que seguían una orden de búsqueda y captura por no haberse presentado el día del juicio, pese a que había sido correctamente citado.
El acusado, que precisó la ayuda de un traductor, es residente del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes. Según explicó el individuo de nacionalidad argelina, el día de la vista los trabajadores del CETI no le permitieron abandonar las instalaciones. «Estaba encerrado», argumentó.
No obstante, la magistrada dictó la orden del ingreso provisional en prisión hasta que se celebre el juicio para evitar que el procesado no comparezca. Será en una semana. Se le juzgará por un presunto robo en el establecimiento Duty Free de Melilla.
Antes de que los agentes de la Policía Nacional lo llevaran a la prisión, el acusado, que permanecía esposado, tenía que firmar la citación judicial. Cuando estaba a punto de firmarla, el hombre se tiró al suelo fingiendo un desmayo, como advirtieron los policías y el resto de presentes en la sala. «Esto nos lo hacen mucho», aclaró uno de los agentes, «pero se llama fantasía».
Con ayuda del traductor, su letrado le aconsejó que «dejara de montar el número». Finalmente, un médico forense acudió a la sala para observarlo y, sin advertir malestar, el individuo abandonó la habitación con los policías para ser trasladado a prisión.